“Los colegios deben aplicar a los préstamos de Reactiva Perú y a los subsidios estatales a la planilla”. (Foto referencial: El Comercio).
“Los colegios deben aplicar a los préstamos de Reactiva Perú y a los subsidios estatales a la planilla”. (Foto referencial: El Comercio).
/ MARIO ZAPATA
Fernando Cáceres Freyre

Muchos padres de familia han visto disminuidos sus ingresos y están presionando a los colegios privados para que reduzcan las pensiones, aplacen el pago de las deudas, congelen las deudas sin intereses, etc. Usando una encuesta de Ipsos, podemos afirmar que aquellos que han visto sus ingresos seriamente perjudicados bordean el 78% en el NSE D, 69% en el C, 54% en el B y 32% en el A.

Pero en educación existe una norma previa que impide a los colegios condicionar el envío de material educativo, el acceso a las sesiones virtuales o el desarrollo de evaluaciones a que los padres paguen las pensiones. Los padres –incluso pre-COVID– pueden optar por no pagar las pensiones desde marzo hasta febrero del próximo año, cuando se dará la siguiente matrícula.

Pero los colegios pueden ahorrar en muy pocos costos fijos para prestar el servicio virtual y, más bien, deben gastar en otros como contratar planes especiales de Internet y desarrollar nuevos materiales. Además, la morosidad, que ya era alta –gracias a esa norma previa–, se disparó en marzo al 60% en el NSE A y al 90% en el NSE D (Adecopa).

El riesgo es que muchos colegios tengan que cerrar. Frente a eso, no estoy de acuerdo con que los colegios otorguen facilidades a todos por igual. Hay que hacer distinciones por familia y nivel escolar. No todas las familias se han visto afectadas de la misma manera. Dar un descuento generalizado es hacer que reciban más descuento quienes no lo necesitan. Mejor sería establecer un proceso rápido para llenar declaraciones juradas –donde la mentira tiene consecuencias penales– para que los padres con necesidades detallen en qué medida se han visto afectados sus ingresos.

De otro lado, no es comparable la autonomía que tiene un alumno de sexto grado de primaria con uno de inicial. Los primeros pueden realizar las tareas por su cuenta, reportando en sesiones cortas a sus maestros. Los segundos necesitan mucho acompañamiento, lo que implica que los padres deben pasar más horas con ellos para que se cumplan los objetivos pedagógicos; tiempo productivo que tienen que restar a sus trabajos y hogar.

En este contexto, pensando como sociedad, creo que la solución tiene varias partes: (i) los colegios deben aplicar a los préstamos de Reactiva Perú y a los subsidios estatales a la planilla, (ii) debe modificarse la norma que permite subsidios ciegos para que solo reciban descuentos los padres cuyos ingresos se hayan visto afectados, (iii) debe considerarse reducir la pensión solo para los niños con menores niveles de autonomía y (iv) debe aprobarse de una vez el reglamento que permitirá a los padres que requieran cambiar a sus hijos de colegio –porque ni siquiera podrán pagar una deuda aplazada o una pensión reducida– acceder a la devolución proporcional de la cuota de ingreso.


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