La historia política del Perú ha sido testigo de períodos de inestabilidad gubernamental debido a una combinación de factores, incluida la corrupción, la polarización política, la debilidad institucional y los desafíos económicos. Estos elementos han contribuido a una falta de consensos políticos, lo que ha generado cambios frecuentes en la presidencia y crisis de confianza en las instituciones. Como resultado, la gobernabilidad del país se ha visto afectada, lo que ha dificultado la implementación de políticas y reformas efectivas para abordar los problemas que enfrenta la nación.
La inestabilidad política de los gobiernos tiene un impacto adverso en la eficiencia de las políticas públicas y en la planificación a largo plazo, lo que disminuye la capacidad de respuesta ante las crisis y promueve la desconfianza y la polarización social. Además, esta inestabilidad impulsa decisiones populistas de corto plazo y desgasta la institucionalidad gubernamental. Estos efectos debilitan la eficacia de las políticas para resolver problemas de forma sostenible, erosionando la estabilidad y el Estado de derecho.
En ese contexto, la presencia de expertos en Ciencia Política resulta fundamental debido a que abarcan en su estudio factores sociales, políticos y económicos interrelacionados. Los politólogos cuentan con la capacidad de llevar a cabo un análisis integral que les permite identificar causas subyacentes y comprender el origen de una problemática. Con base en esta comprensión, evalúan diversas soluciones aplicadas en políticas públicas y promueven el diálogo para fortalecer la gobernabilidad democrática. Su enfoque informado y estratégico se orienta hacia la búsqueda de soluciones efectivas y sostenibles para fortalecer la estabilidad del país. Así, su experiencia resulta fundamental en la gestión de las crisis y en la búsqueda de caminos que conduzcan a un país más resiliente y equitativo.
Por lo tanto, se puede concluir que la Ciencia Política desempeña un papel indispensable en la gestión de las crisis al analizar y comprender los desafíos políticos y sociales en momentos de incertidumbre. Los politólogos, con su mirada transversal y comparada, proponen soluciones efectivas para abordar problemas que impactan en la sociedad y en el Estado. En ese sentido, la creciente frecuencia de las crisis demanda más politólogos para fortalecer la toma de decisiones políticas, promover la estabilidad gubernamental y enfrentar desafíos globales.