Cañete: cientos de invasores desalojados de predio privado

Parados en un descampado de la Panamericana Sur, 400 policías recibieron ayer una sola orden: retirar como sea posible a las 500 personas que ocupan la pampa ubicada frente al centro poblado Nuevo Ayacucho, en Cañete (región Lima). 

Se trata de un terreno privado de 141 hectáreas, entre los kilómetros 171 y 173 de la vía, que vecinos de Nuevo Ayacucho han invadido desde el 2016, impulsados por el dirigente Yosbel García Buasbek. Este es acusado de encabezar una mafia que ocupa y trafica tierras.

Antes del amanecer, parte del contingente bloqueó las laderas del centro poblado por donde los moradores bajan hacia el terreno. Otro grupo de agentes, entre estos de la Policía Montada, inició la incursión a las 6 a.m.

Familias enteras salían del lugar con lo poco que tenían y sin que hubiera enfrentamientos, pero pronto la policía encontró resistencia. El dirigente Joaquín Ayala, sindicado como lugarteniente de García, fue sorprendido azuzando a un grupo de personas para que no dejaran las áreas ocupadas. Ayala quedó detenido junto con otros tres hombres.

El lunes, El Comercio publicó un reportaje sobre el tráfico de tierras en Nuevo Ayacucho. En la nota, Ayala dijo que las denuncias en contra suya y de García provienen de opositores políticos.

Mientras tanto, hombres y mujeres que burlaron el cordón policial para luego descender por una pendiente  bloquearon el tránsito en la Panamericana Sur. Allí, Javier Palomino, otro dirigente de Nuevo Ayacucho a quien la policía también investiga por su cercanía a Yosbel García, aseguró que a los invasores los ampara una constancia de posesión emitida por la Municipalidad Provincial de Cañete.

Los agentes tuvieron que usar gases lacrimógenos para dispersar a la turba. Palomino y cuatro mujeres fueron arrestados.Con el terreno liberado, dos tractores iniciaron el derribo de un muro, de casi un kilómetro, que había sido levantado por los invasores a un lado de la carretera.

Alta tensión

Cuando el terreno había quedado liberado, y se ordenó la retirada de los cordones policiales en Nuevo Ayacucho, sujetos en motos y camionetas volvieron a irrumpir. Sin embargo, las fuerzas del orden se reorganizaron rápidamente y capturaron a tres hombres armados. Varias personas que han sufrido invasiones y el despojo de sus predios en la zona aseguran que Yosbel García trabaja con sujetos armados.

Casi a las 10:30 a.m., camino a Chincha, un volquete que llevaba materiales incautados a los invasores fue retenido por al menos 60 revoltosos cerca del puente Jahuay. Incluso golpearon al chofer y a dos suboficiales que iban con él; luego prendieron fuego al camión, que quedó totalmente quemado a un lado de la vía. La policía volvió a incursionar en varios sectores del centro poblado, y otras dos personas fueron detenidas.

Terreno privado

El terreno por el cual ayer se realizó  todo este despliegue policial fue inscrito en 1958, a nombre de una sucesión, según consta en documentos registrales a los que accedió El Comercio. 

En su momento, Yosbel García presentó una resolución de la Superintendencia de Bienes Nacionales (SBN) que, a su juicio, establecía que el terreno en cuestión pertenecía al Estado.  

Sanción penal

Según el abogado penalista Luis Lamas Puccio, el delito de usurpación agravada de terrenos podría ser penado hasta con 12 años de prisión.

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