Dos vasos de plata conocidos como aquillas fueron desenterrados por arqueólogos que investigan el sitio arqueológico Purunllacta de Soloco, una de las pequeñas ciudades construidas por la cultura Chachapoyas, hace unos mil años.
Según el arqueólogo estadounidense James Crandall, quien hizo el hallazgo, se trata de la primera vez que se encontraron aquillas en su contexto original. Hace 20 años, un grupo de saqueadores encontraron siete de estas en un barco que naufragó en 1622, en el mar de Caribe.
El especialista explicó que el descubrimiento es importante porque es una evidencia contundente de que tanto los incas como los españoles llegaron hasta Purunllacta de Soloco. “En otros sitios chachapoyas, sí existían evidencias de ambas conquistas. Ahora, sabemos que también llegaron hasta este sitio”.
Crandall explicó que la iconografía encontrada en los vasos incas tiene influencia colonial, ya que los personajes que allí aparecen visten indumentaria imperial y sombreros españoles.
Sobre esta mezcla cultural, el estudioso de la cultura Chachapoyas Federico Kauffmann afirma que no es raro, porque treinta años después de la conquista los nativos producían keros de madera con influencia española.
El arqueólogo Lorenzo Risco, quien colaboró en la investigación, detalló que las aquillas fueron enterradas en un hoyo y en sus alrededores se prendió fuego, posiblemente en torno a una ceremonia. Luego, el lugar fue cubierto con una edificación de piedra.