A dos semanas de cumplir un año en prisión investigado por el crimen del ex consejero regional Ezequiel Nolasco Campos, el ex presidente regional de Áncash, César Álvarez Aguilar, decidió dejar el silencio y dio declaraciones a la revista “Correo Semanal”.
La ex autoridad regional investigada por asesinato y otros delitos de corrupción negó una vez más que haya mandado matar a Nolasco, incluso afirmó que no le convenía (matarlo) porque lo culparían a él.
“La Sala Suprema del doctor César San Martín me ha exculpado después de cuatro años de investigaciones (sobre el primer atentado que sufrió Ezequiel Nolasco), pero eso no lo publica ni lo dice nadie”, señaló.
Desde el penal de Piedras Gordas, Álvarez dijo que el sicario (Joel Cruzate Pereda) ha expresado reiteradas veces ante el juez del caso que fue torturado en la Policía para que declare en su contra.
Con respecto al asesinato del ex vicepresidente regional José Sánchez Milla (ocurrido en julio del 2010), aseguró que era su amigo y no tenía por qué mandarlo matar. “Además la Policía elaboró un informe donde concluye que fue un intento de asalto”, anotó.
El ex presidente regional ahora preso insistió en que es falso que se haya enriquecido ilícitamente con dinero del Gobierno Regional de Áncash y que nunca pagó a fiscales, jueces y periodistas.
No obstante, aceptó que en algún momento visitó al ex fiscal de la nación Carlos Ramos Heredia cuando era titular de la Fiscalía de Control Interno y que apoyó con logística al congresista Heriberto Benítez, a quien considera su amigo.
El 16 de mayo, el ex presidente regional de Áncash César Álvarez y el ex alcalde de la provincia del Santa Luis Arroyo Rojas cumplirán un año en la cárcel, acusados ambos del asesinato de Ezequiel Nolasco.