La Corte Suprema de Justicia declaró improcedente la solicitud de rehabilitación que Waldo Ríos Salcedo, candidato a la presidencia regional de Áncash, presentó a inicios de mes para sincerar su postulación electoral.
Ríos Salcedo fue cuestionado por no haber dado cuenta de las normas de conducta que observó durante los cuatro años de prisión suspendida que le impusieron tras recibir US$10 mil del ex asesor, Vladimiro Montesinos. El pago propició que el entonces congresista por el Frente Independiente Moralizador (FIM) se pasara a las filas del fujimorismo en el 2000.
Según informó el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), el fallo de la corte fue enviado el pasado 9 de octubre al Jurado Electoral Especial (JEE) de Huaraz. Este organismo deberá responder a Ríos, quien aún disputa el sillón regional para el Movimiento Independiente Puro Áncash.
Ulises Montoya, ex miembro del pleno del JNE, informó a El Comercio que, con la decisión de la corte, la candidatura de Ríos sería declarada improcedente pues ningún ciudadano puede asumir funciones públicas si tiene algún proceso penal pendiente.