Los 27 cuerpos de los fallecidos en el incendio en el socavón de la mina Yanaquihua (Esperanza I), ubicada en el distrito homónimo, provincia Condesuyos, Arequipa, fueron rescatados y llevados hacia el Instituto de Medicina Legal de Arequipa donde se les realizó la autopsia de ley.
El sábado por la madrugada se registró un incendio, seguido de un derrumbe, en dicho socavón. Investigaciones preliminares indican que un cortocircuito habría sido la causa del siniestro. La empresa contratista que operaba en la mina es Sermigold E.I.R.L.
Tras una labor especializada de rescate, los 27 cuerpos fueron recuperados a las 10:50 p.m. del domingo, según indicó el Ministerio Público. Luego fueron trasladados hasta Arequipa donde se les realizó la necropsia de ley a cargo del personal de Medicina Legal y la presencia de un equipo fiscal.
La Fiscalía indicó que, según la necropsia, la causa de muerte fue intoxicación por monóxido de carbono. La labor especializada estuvo a cargo de cinco equipos de Medicina Legal y ocho fiscales penales de Arequipa.
El lunes por la mañana, el Fiscal Superior Coordinador de las Fiscalías Penales, Antonio Chacón Reselló, había señalado que se trabajaría con fiscales en rotación debido a que el Instituto de Medicina Legal no contaba con la capacidad para realizar la autopsia a todos los fallecidos al mismo tiempo.
Culminada la identificación y los respectivos exámenes, se inició la entrega de los cuerpos a los familiares acreditados. Desde tempranas horas de la mañana, familiares habían esperado fuera de la morgue. Aproximadamente a las 3 p.m. personal encargado comenzó a llamar a las familias, pero fue recién a las 6:15 p.m. que se entregó el primer cuerpo, el del fallecido Elvis Iquiapaza Canaza de 24 años.
Su hermano, junto a más familiares, llegaron desde Juliaca, Puno, para recoger el cuerpo. Aseguraron que la empresa está cubriendo los gastos de la funeraria, pero pidieron cumplir con los demás beneficios y con la seguridad que cualquier trabajador merece. Indicó que seguirán presionando para que se realicen las investigaciones.
A los pocos minutos, el segundo cuerpo fue entregado, el de Adriel Cadena Huachaca, a su padre Genaro Cadena. Seguido de Jhon Carlos Machaca Condori, originario también de Puno. Al cierre de esta nota, autoridades continuaban con este proceso.
Las diversas familias piden que continúen las investigaciones para poder encontrar responsables de este fatídico hecho. Desde Lima, la hermana y cuñado de Juan Manuel Rojas, de 24 años y quien trabajaba hace un año en la empresa, conversaron con TV Perú y pidieron que la empresa se haga responsable.
Eddy Clemente Coaquira Flores
Florencio Cruz Apaza
Jesús Huahuaccapa García
Guino Humpin Humpiri
Marcelino Calcina Mamani
Yhon Carlos Machaca Condori
Dino Jhon Quina Quina
Juan Manuel Rojas Bravo
Ignacio Cabana Vilca
Julio Condori Ramos
Oriel Jhon Roque Quispe
Ronald Alcides Soto Palli
Urbano Jaime Chacondori Chavez
Percy Callata Coaquira
Elvis Iquiapaza Canaza
Hugo Vidal Coila Balcona
Delfin Anastacio Quintana Cueva
Reynaldo Uñapillco Huallpa
Yasmani Víctor Roque Suárez
Ceferino Huahuaccapa García
Federico Idme Mamani
Pedro Ciro Totocayo Quispe
Elvis Sánchez Chicasaca
Apolinar Flores Meneses
Adriel Cadena Huachaca
Wiliam Melanio Cuentas Puma
Angel Jimenez Copari
Investigaciones
Hasta el lunes por la tarde, personal fiscal se encontraba realizando las diligencias necesarias para esclarecer la muerte de los 27 trabajadores. En un comunicado, la Fiscalía indicó que recabarán las declaraciones de los representantes de la minera Yanaquihua, representantes legales de la contratista e información respecto a los protocolos de seguridad, procedimientos, registro de trabajadores, entre otra documentación.
Recordemos que el domingo el fiscal a cargo, Giovani Mattos solicitó la presencia de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) para investigar la condición en la que se encontraban los trabajadores. Asimismo, efectivos policiales de la Depincri realizaron las diligencias correspondientes en el lugar de los hechos.
Sunafil no se ha pronunciado sobre la investigación del accidente. Pero, el domingo publicó un comunicado donde explicó que apenas se alertó a la entidad, se coordinó para que el personal de inspección se traslade al lugar del siniestro.
Falta de supervisión a empresas mineras
En conversación con este Diario, Ángel María Manrique, jefe de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Arequipa, indicó que las investigaciones siguen en curso y se deben esperar los resultados para saber qué fue lo que pasó. Sin embargo, explicó que a nivel regional la supervisión y fiscalización de empresas en zonas mineras es crítica y genera un problema de seguridad.
“En Arequipa se viene incrementando la labor minera a través de pequeñas y medianas empresas, que son formales, pero no reciben la fiscalización del Estado. Ha habido incremento en las provincias de Arequipa, pero esto no ha sido acompañado por el Estado para resguardar los derechos de los trabajadores y fiscalizar el tema ambiental y social”, indicó.
Agregó que varias de las minas en Arequipa son socavones, por lo que los organismos de fiscalización de energía y minas y Sunafil deberían tener medidas especializadas para fiscalizar estas actividades extractivas de alto riesgo.
Por su parte, el Yakir Rozas, gerente de Energía y Minas del Gore Arequipa, indicó a RPP Noticias que el área de fiscalización de la gerencia de energía y minas de Arequipa solo cuenta con cuatro personas para hacer el trabajo y una camioneta. En contraparte, hay unas 17 mil personas autorizadas en toda la región para actividades extractivas.
Por otro lado, indicó que, según antecedentes de años pasados, no se había realizado una inspección a la mina Esperanza I ni a la empresa Sermigold. Esto contradice un comunicado que emitió el domingo el Gobierno Regional de Arequipa donde mencionó que la minera Yanaquihua, así como la empresa contratista Sermigold, se encuentran formalizadas y pueden operar desde el 2014. Además, habían pasado inspección técnica de seguridad en noviembre del año pasado.
Según un artículo publicado en el medio Bloomberg, entre 2010 y 2021, más de 500 trabajadores mineros murieron en Perú. Esta cifra no incluye a trabajadores en minas informales. Si se compara con Chile, otro de los grandes productores de cobre, la cifra es el doble.
Carlos Bellido, ingeniero electrónico especialista en estructuras y dinámica de incendios, comentó a este Diario que no se puede saber si hubo negligencia de la empresa hasta tener las investigaciones cerradas. “No sabemos si tenían un sistema contra incendios que estuviera hecho de acuerdo al riesgo específico, si lo tenían y no funcionó, o sino lo tenían”, dijo.
Agregó que la legislación peruana es muy débil con respecto a temas de riesgos en minas. “Cuando hay un incendio en minas de socavón son situaciones muy complicadas porque el humo va por todos los ambientes y afecta a las personas muy rápido. Generalmente los sistemas de protección que se utilizan en Perú son simples porque no contemplan el riesgo tan grande de un incendio en una mina de socavón”, indicó.
El presidente del Consejo Regional del Gore Arequipa, Miguel Ángel Lineras Riveros, citó para este miércoles 10 de mayo al Gerente Regional de Energía y Minas, ing. Yakir Rozas Manya, a una reunión informativa para conocer más sobre el accidente y las acciones preventivas dispuestas por el despacho para esta actividad minera.
Testimonio de un sobreviviente
Los familiares de los fallecidos se encontraban afuera de la morgue junto con un trabajador de la mina que se salvó del accidente, pues habría salido del socavón minutos antes del incendio. Esta persona acudió a acompañar a los familiares de sus compañeros.
El trabajador conversó con El Comercio, de manera anónima, y comentó que cuando salió de la mina, aproximadamente a media noche, no había nada anormal. Aunque le dijeron que en la parte de abajo ya habría humo, “estamos hablando de una profundidad de unos 200 metros o más”, dijo.
Explicó que la distancia entre el punto donde inició el incendio y donde estaban trabajando los mineros habría sido de unos 300 metros.
“Muchos [trabajadores] han renunciado, la mayoría”, sostuvo. Ante las preguntas, apuntó que a él la empresa nunca lo había tratado mal.