Los relaves producidos por granjas de cerdos y curtiembres del distrito de Cerro Colorado han contaminado los manantiales que dotan de agua a más de 280 hectáreas de cultivos que se ubican en la quebrada de Añashuayco, en el distrito de Uchumayo.
Según Miguel Zegarra López, subgerente de fiscalización del municipio de Uchumayo, los residuos químicos de las curtiembres instaladas en el sector de Río Seco están afectando a 80 agricultores que se dedican al cultivo de hortalizas, tubérculos y árboles frutales.
Por otro lado, los desagües de cuatro granjas porcinas también se están filtrando y han comenzado a discurrir por las zonas agrícolas.
“Hemos comprobado que los manantiales en un tramo de diez kilómetros del valle se han transformado en pozos sépticos. Estas aguas contaminadas no solo dañan los cultivos, también representan un problema de salud pública”, explicó Zegarra.
Zegarra indicó que a pesar de las constantes intervenciones que realizan en la zona, el municipio de Uchumayo no puede multar a las granjas y a las curtiembres ya que están dentro de la jurisdicción de Cerro Colorado.