La gobernadora regional de Arequipa, Yamila Osorio, está preocupada. En conversación con El Comercio, ella asegura que la caída del canon minero en su región este año ha sido de más del 90% de lo previsto. Esto, alerta, pondría en jaque las obras públicas en una de las regiones que más depende de estas transferencias. La caída del precio de los minerales sigue pasando factura.
La preocupación de Osorio es compartida por las autoridades de al menos 15 regiones del país. En Arequipa, un grupo de alcaldes planea una movilización para este jueves en protesta por los menores ingresos recibidos.
De acuerdo al Portal de Consultas de Transferencias del Ministerio de Economía y Finanzas, el monto que se otorga a las regiones, municipalidades y universidades estatales por canon minero este año es el más bajo de la última década. El canon minero es la principal fuente de recursos de los gobiernos regionales y locales para financiar la inversión pública.
Pero este panorama sombrío no es nuevo. Desde el 2013 hay un descenso continuo de las transferencias en el país. En rigor, este año el Gobierno Central repartirá S/1.497 millones, monto que es 33% menor que lo registrado el año anterior y 70% menos respecto del máximo observado en el 2012 [ver infografía].
Las regiones más afectadas son Arequipa, con S/335 millones menos que en el 2015; Áncash, con S/101 millones menos; y Cusco, con S/88 millones menos.
Las cuatro regiones que más dinero recibirán este año son Áncash, La Libertad, Cajamarca y Moquegua con S/973 millones, en conjunto. Este monto, dista de los S/2.282 millones del 2012.
—Futuro pesimista—
La caída del precio de las materias primas, registrada desde el 2011, es la principal explicación para el descenso del canon minero. Según el Fondo Monetario Internacional, el escenario a la baja se mantendrá durante los próximos 5 años, en especial en el caso del precio del oro y el cobre, nuestros principales minerales de exportación. En el caso del oro se espera un descenso de 8% para el período 2015-2021 mientras que el cobre caería en 14% en el mismo tiempo.
La caída de los precios afectará las utilidades de las mineras. Ello determinará que baje su Impuesto a la Renta (de ahí provienen los recursos del canon) y, por tanto, que haya menos recursos para distribuir.
Gustavo Ávila, investigador del Grupo Propuesta Ciudadana, señala que las transferencias por canon minero no incrementarán en los próximos cinco años, incluso con la puesta en marcha de proyectos.
“El próximo año se espera que el gobierno transfiera S/1.600 millones y que continúen en ese nivel. Y la recuperación de la inversión [con nuevos proyectos en operación] no se traduciría en mayores ingresos hasta en unos cuatro años”, señala.
—Ineficiencia—
Aunque las autoridades regionales y locales dicen estar preocupadas por la reducción del canon, su nivel de ejecución presupuestal deja mucho que desear. Según el MEF, estos organismos ejecutaron en el 2015 menos del 80% de su presupuesto de inversión anual.
Además, las graves denuncias de corrupción en regiones como Áncash, Cajamarca o Pasco son un problema adicional al de la disminución del presupuesto. Hoy, cinco ex presidentes regionales están presos por irregularidades.
Áncash, la región que recibe más canon minero (S/8.000 millones en los últimos 13 años), ha perdido cerca de S/200 millones por corrupción durante el período 2009-2014.
—Propuestas—
Frente a esta situación, lo que propone la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales es implementar un fondo de contingencia para ayudar a las localidades donde más se redujo el canon.
Para Ávila, además se requiere una solución a largo plazo. “Lo que se necesita es un adecuado esquema de descentralización fiscal, donde las regiones tengan ingresos más previsibles y ordenados”, apunta.