La primera semana de febrero pasado, Pro Inversión canceló el proceso de concesión del proyecto Hidrovía Amazónica, iniciativa del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) que busca asegurar la navegación en los ríos Huallaga, Ucayali, Marañón y Amazonas las 24 horas durante todo el año. La agencia estatal, amparada en una cláusula, no indicó las causas que llevaron a tomar dicha decisión, a pesar de que la empresa china Communications Construction Co. Ltd. había presentado una propuesta técnica y económica.
El motivo de dicha determinación habría sido la acción de amparo interpuesta por la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipishca (Acodecospat), y aceptada por un juzgado de Nauta (Loreto) que estableció la realización de la consulta previa antes de continuar con los demás procesos de la concesión.
Entre marzo y la primera quincena de setiembre, el MTC desarrolló diez talleres informativos en las comunidades de Loreto y Ucayali del ámbito de influencia. El Ministerio de Cultura, en este período, dio inicio al proceso de consulta con las comunidades. La etapa de diálogo culminó anoche en una reunión realizada en Iquitos. Las representantes de las comunidades firmaron un acta donde aceptan el desarrollo del proyecto, no obstante, pusieron condiciones.
Observaciones
De acuerdo al estudio de factibilidad difundido por Pro Inversión, se plantea realizar el dragado del canal de navegación de los ríos amazónicos en una longitud de 2.687 km. El retiro de arena se hará en áreas de 56 metros de ancho y 1,83 metros de profundidad. En algunas zonas será necesario dragar hasta en 2,5 metros. Esto fue observado por el presidente de Acodecospat, Alfonso López Tejada, quien sostiene que el hábitat de los pueblos indígenas estaría en riesgo. “Puede haber impactos a la biodiversidad”, dijo.
En el ámbito de intervención del proyecto, el Ministerio de Cultura identificó a los pueblos indígenas achuar, asháninka, awajún, bora, capanahua, kichwa, kukama kukamiria, murui-muinani, shawi, shipibo-konibo, tikuna, urarina, yagua y yine, en más de 350 comunidades.
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