Melissa Valdivia Romero

La ciudad inca de , ubicada en la provincia cusqueña de Urubamba, sigue siendo el destino preferido para cualquier ciudadano del mundo que llega a Perú. Sin embargo, el aumento progresivo del aforo, las advertencias de afectación del patrimonio cultural, agencias turísticas informales, denuncias de mafias en la venta de boletos, conflictos sociales, quejas en los servicios de tren, visitantes que no alcanzan un boleto al santuario; entre otros casos son los problemas recurrentes en torno a la maravilla mundial.

El pasado 26 de agosto, mediante Resolución Directoral N°001102-2022-DDC-CUS/MC, el Ministerio de Cultura dispuso la venta de hasta mil boletos de manera presencial en el distrito de Machu Picchu para ingresar a la Llaqta Inka, decisión tomada según la entidad “dentro del marco de la capacidad de admisión de visitantes” y atendiendo la “petición de la población” de Machu Picchu Pueblo que en la víspera de aquella fecha había anunciado un paro indefinido.

Durante la primera semana de octubre, los fiscales de Turismo, Rubén Villena Soria y de Prevención del Delito, Eduardo Poblete Barberis constataron las colas interminables que forman los turistas nacionales y extranjeros para acceder a un boleto físico de ingreso a la llaqta. Según las diligencias el problema se generó, porque la Dirección Desconcentrada de Cultura Cusco (DDCC) redujo los horarios de venta de los boletos. Antes se ofertaba en dos horarios: mañana y tarde; y ahora solo la venta es a partir de las 16:00 horas, lo cual genera malestar en los visitantes y es una manera de maltrato, según han denunciado.

Dentro de ese escenario, el fiscal de Turismo, recomendó al sector Cultura que traten de cambiar las normas administrativas para que se dé una cobertura más rápida y adecuada a los turistas y no generar incomodidad en ellos.

Al respecto, el presidente del Frente de Defensa de los Intereses de Machu Picchu (Fredim), David Moreno, sostuvo que se ha implementado un sistema de ventas donde solo hay dos ventanillas razón por la cual se forman grandes filas. David Moreno asegura que hace tiempo recomendaron la implementación de cinco ventanillas como mínimo para que se dé un mejor servicio y se viabilice la atención; sin éxito alguno.

El Ministerio de Cultura debe hacer un mea culpa porque si no ha funcionado el sistema de ventas en Machu Picchu ha sido por culpa de ellos, en el comité de la UGM se quedó en habilitar cinco ventanillas, sin embargo, solamente abrieron dos, por ello sigue el problema. Ellos alegan que no tienen personal y presupuesto”, señaló el dirigente.

La capacidad de admisión de personas a la maravilla mundial es de 4.044 visitas al día, la medida actual permite que el 75% de boletos se venda de manera virtual y el 25% de forma física. Un anuncio adelantado del Ministerio de Cultura de establecer un sistema para que la venta total de boletos sea de manera electrónica, encendió las alarmas en los pobladores de Machu Picchu que rechazaron la noticia anunciando la realización de un paro, el mismo que ingresó en tregua hasta el 06 de noviembre.

Ante esta situación, la ministra de Cultura Leslie Urteaga se reunió el jueves último con autoridades cusqueñas, gremios turísticos y representantes de la sociedad civil del distrito de Machu Picchu.

Durante la reunión, la ministra presentó la plataforma única virtual para la venta de boletos de ingreso a la Ciudadela Inka “” y que incluirá además a otros centros arqueológicos del Perú. “Esta es una alternativa de mejora. Es un desafío para la modernización del servicio que será para todo el Perú. Será una plataforma única, transparente, auditable y segura, que ya utilizamos en el Gran Teatro Nacional con grandes resultados. Funciona todo el día y se puede pagar de diversas maneras, tiene muchas ventajas”, detalló Urteaga.

Mediante un comunicado la Cámara Regional de Turismo Cusco respaldó las intenciones de implementar dicha plataforma digital. “La venta online aporta positivamente porque se tendrá mayor transparencia, orden, confiabilidad en el servicio turístico. Los habitantes de Machu Picchu mejorarán la mala imagen que ahora tiene el pueblo, cuando los visitantes se ven obligados a hacer largas colas, perder variar horas y son condicionados a quedarse por una o varias noches para poder acceder a un boleto. El pueblo de Machu Picchu debe concentrarse en generar más servicios, que complemente el gran atractivo de la llaqta”, se lee en el comunicado.

Machu Picchu pueblo

Por su lado, el presidente del frente de defensa, David Moreno durante su intervención en la reunión con el Ministerio de Cultura explicó las razones de su desacuerdo con la digitalización “total” de la venta de boletos.

Como sociedad civil necesitamos que se respete la RD N° 1102, porque ese es el ancla del desarrollo económico del pueblo, esos mil boletos o ese 25% de boletos que se vende en Machu Picchu Pueblo dinamiza la economía de todos los sectores, indistintamente de las agencias de turismo. Nuestro temor es que cuando todo se virtualice nosotros seremos presa de los operadores de turismo y agencias; a veces las agencias de turismo son las que monopolizan el turismo, tienen mercados privados de artesanías, etc., direccionan, entonces qué ventaja tenemos nosotros como población de poder competir ante ellos, por ello nuestra ventaja es que se respete ese 25 % de venta presencial de boletos en Aguas Caliente” dijo.

Al mismo tiempo aclaró que no se oponen a la implementación de la plataforma digital “Nosotros no nos oponemos a la modernidad, que se implementen sistemas más veloces, efectivos, que se haga lo que se tenga que hacer para modernizar el sistema de ventas para Machu Picchu pero si se virtualiza el 100% de boletos vamos a tener problemas sociales, desde hace mas de noventa años generaciones han invertido en Machu Picchu, qué va a ser de ellos cuando solo vean pasar al turista, acaso vamos a esperar programas del gobierno para que nos podamos reactivar”, acotó David Moreno.

Este año Machu Picchu cumplió 16 años de ser declarada como una de las siete maravillas a nivel mundial, título que impulsó el turismo en el país hasta marzo de 2020, también enfrentó la pandemia por la Covid-19 y su población aún se viene recuperando poco a poco, pese a todo sigue siendo la referencia turística por excelencia del Perú, no obstante, hay varios temas pendientes por ajustar y resolver.