Ingreso a la ciudadela de Machu Picchu sería reubicado

Luego de una visita de trabajo, el viceministro de Patrimonio Cultural, Luis Castillo Butters, y el director regional de Cultura de Cusco, Ricardo Ruiz Caro, coincidieron en la necesidad de implementar nuevas medidas para preservar el sitio arqueológico, y garantizar la comodidad de los turistas nacionales y extranjeros.

Una de estas sería la reubicación del puesto de control de ingreso a la ciudadela inca. Este sería trasladado a pocos metros del puente Ruinas, cerca del Museo de sitio Manuel Chávez Ballón. Aquí se realizaría el control de visitantes, mediante un gran centro de interpretación. Mientras tanto, el museo se convertiría en un centro de investigación de primer nivel, informó el corresponsal de El Comercio, Ralph Zapata.

En este último lugar, el personal del Ministerio de Cultura brindaría información científica a los turistas acerca de Machu Picchu, y sobre las investigaciones realizadas. Luego se continuaría a pie hasta la ciudadela inca. En el centro de investigación habría también servicios higiénicos, guardarropa y un tópico.

MÁS CAMBIOS PARA MACHU PICCHU
Las autoridades culturales también han evaluado la necesidad de instalar servicios higiénicos de emergencia dentro de la ciudadela, que diariamente recibe 2 mil 500 visitantes. “Se realizarán los estudios necesarios, se rescatarán algunas experiencias aplicadas en otros monumentos mundiales y se consultará a los especialistas en el tema a fin de no afectar la sacralidad del sitio ni alterar el medio ambiente”, dijo el viceministro de Patrimonio Cultural, Luis Castillo Butters.

Ruiz Caro anunció también que se modernizarán las instalaciones destinadas a vivienda y servicios básicos de los servidores de la entidad cultural. “Queremos brindar todas las comodidades a los turistas nacionales y extranjeros replicando las mejores experiencias de lugares emblemáticos del patrimonio mundial, pero al mismo tiempo, vamos a exigir respeto al monumento y a su sacralidad”, comentó el funcionario.

Las medidas serán evaluadas en breve para que las modificaciones se apliquen de inmediato. De esta manera se garantizará la conservación del monumento inca y se fomentará la investigación en beneficio de los turistas.