Ayer se reanudó el proyecto de remodelación de la Plaza de Armas de Chincha, que inicialmente contemplaba la tala de 50 palmeras.
Tras las denuncias publicadas en El Comercio, la plaza se declaró como patrimonio cultural, y con ello se logró modificar el primer bosquejo del plan, el cual hoy establece reubicar solo doce palmeras.
Inicilamente, el alcalde Lucio Juáre había insistido en continuar con las obras, pero desde el Ministerio de Cultura se alertó en su momento que la autoridad iba a ser denunciada penalmente si no acataba la resolución que protege a la plaza.