:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/5RDMRQJTC5BINMQVNUKOQNVK64.jpg)
JOSÉ ROSALES VARGAS
La región más desértica del país es Ica. De abril a diciembre, sus ocho ríos se convierten en riachuelos y las lluvias son casi inexistentes. Por ello, el científico iqueño Francisco Pérez Silva, ya fallecido, siempre planteó la necesidad de desarrollar proyectos hídricos. “Agua o muerte”, decía a menudo.
Una vieja propuesta que sigue siendo solo un sueño es canalizar y represar las aguas del río Pampas, en Huancavelica, para irrigar el sediento desierto de Ica. “El déficit de agua, que se siente más fuerte desde hace diez años, ha paralizado las inversiones en el campo”, advierte el vicepresidente de la Asociación Salvemos Huacachina, Francisco Massa Pardo.
Esta escasez de agua también se sufre en los hogares: casi la mitad de la población de la región Ica accede al agua potable con restricciones. “Las nuevas autoridades deberán aprovechar al máximo las aguas del río Pisco, y construir el canal de Ingahuasi y la presa Tambo”, añade Massa.
El gerente general de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Ica, Daniel Acevedo Jhong, también indica que las inversiones agrícolas se han frenado por el estrés hídrico. “Esto está causando la desaceleración de la economía regional”, sostiene.
El alcalde de Ica, Gustavo Martínez García, prometió dejar concesionado el proyecto de captación de agua de deshielos en la parte alta del distrito de Los Molinos y canalización hacia Ica. “Esta obra demandará una inversión de 105 millones de soles”, precisó.
DELINCUENTES AL ACECHO
La inseguridad es otro problema grave en esta región. Un estudio del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) revela que el 29,9% de los iqueños han sido víctimas de la delincuencia este año. El jefe de la Región Policial de Ica, general PNP Manuel Mondragón Campuzano, asegura que esta situación se revertirá cuando empiece a operar un sistema regional de videovigilancia, el primero del país, en este mes de septiembre. “Se instalarán 140 cámaras en las cinco provincias de la región, que serán monitoreadas desde una estación de control conectada a la central telefónica 105”, explica.
El jefe policial añade que estos equipos fueron probados durante las últimas tres semanas. “Solo con estos ensayos logramos realizar 203 intervenciones policiales en la provincia de Ica”, informa.
El comisionado de la Defensoría del Pueblo en Ica, Teddy Panitz Mau, exhorta a la policía, al Gobierno Regional de Ica y a las diferentes comunas involucradas a que el sistema de videovigilancia entre en operación cuanto antes. “Es una obra muy promocionada, pero aún no funciona. Espero que con este servicio disminuyan el sicariato y las extorsiones”, dice.
Panitz Mau expone un tercer problema que afecta a la población iqueña: la corrupción. Considera que las obras mal ejecutadas, abandonadas e inconclusas generan una percepción de desconfianza en la gente. “Los hechos de corrupción, denunciados generalmente por la prensa, afectan las inversiones y dañan la moral de la población”.
Al respecto, el consultor iqueño en temas de inversión y desarrollo José Moquillaza Risco opina: “Las autoridades que se elijan el próximo 5 de octubre deberán transparentar su gestión, investigar a sus antecesores y denunciar a quienes se beneficiaron de los puestos públicos, como sucedió durante el proceso de reconstrucción posterremoto”.
