Como en otras 17 carcelerías del país, la requisa en el penal El Milagro de Trujillo se inició cerca de la medianoche y terminó a las 7 a.m. Treinta fiscales –a cargo de la fiscal superior Lea Guayán Huaccha–, unos 200 agentes del INPE y una veintena de policías participaron en la megaoperación.
Los más de 3.600 internos fueron obligados a salir de sus respectivas celdas y luego fueron conducidos a un patio de la carcelería. En el pabellón B de máxima seguridad se encontraron 7 celulares, 19 chips, envoltorios de PBC y marihuana, además de un USB escondidos entre la ropa y otras pertenencias de los internos. Huecos en las paredes hechos por ellos mismos también servían para esconder ilícitamente los objetos prohibidos.
(Video: Ministerio Público)
Situación similar se observó en los pabellones A, B1 y B2. Además fueron intervenidas las gabetas de los agentes del INPE. Pese a que no se halló ningún objeto prohibido en sus casilleros, no se pudieron abrir todos por no estar presentes todos los trabajadores asignados.
(Video: Ministerio Público)
El ingreso de celulares a cualquier centro de reclusión del país está prohibido por ley. Y pese a que el año pasado el entonces ministro del Interior, Walter Albán, inauguró un grupo de bloqueadores de celular en la carcelería de Trujillo para evitar que desde este centro de reclusión se continúen haciendo extorsiones, en el penal El Milagro se continúan planificando y ejecutando este tipo de delito.
(Video: Ministerio Público)