Los 7.695,43 kilos de cocaína incautados la semana pasada en un inmueble de Huanchaco, en Trujillo, se encuentran en la sede de la Dirección de Operaciones Especiales (Diroes), en Ate, a la espera de ser incinerados.
Las más de 7 toneladas de droga llegaron esta mañana a Lima procedentes de Trujillo. Ello tras el arduo trabajo de recuperación del estupefaciente que se encontraba camuflado en paquetes tipo ladrillo dentro de bloques de carbón.
(Foto: Difusión)
“Para quemar toda esta droga, por lo menos, se va a necesitar una semana”, explicó hoy el ministro del Interior, Daniel Urresti. Él consideró además que se trata “del golpe más grande contra el narcotráfico en la historia del Perú”.
La droga estaba en un inmueble del sector Valdivia Baja, en Huanchaco. De acuerdo a información policial, habría sido acopiada por peruanos para una organización, supuestamente un cártel mexicano. Hasta la fecha se ha informado de 10 detenidos: dos mexicanos y ocho peruanos.
“En el Perú no tenemos cárteles de la droga, sino acopiadores ligados a un cártel u organización extranjera. Se presupone, porque eso está en investigación, que capitales de cárteles mexicanos han venido acá a instalar dos empresas exportadoras legales con la finalidad oculta de que una vez que estén posicionadas en el mercado como empresas serias, utilizarlas para sacar la droga del país”, refirió Urresti.
(Foto: Difusión)
MÁS DE US$150 MIL MILLONES
El avión que trasladó la droga llegó a Trujillo a las 3 a.m. y dos horas después partió a Lima con la ilegal mercancía valorizada en unos US$150 mil millones en el mercado europeo, reportó Johnny Aurazo, corresponsal de El Comercio.
Las toneladas de clorhidrato de cocaína habían sido trasladadas a la delegación policial de San Andrés, en Trujillo, donde todavía permanecen detenidas las ocho personas vinculadas al presunto cartel mexicano que se encargaba de llevar la droga a España y Bélgica.