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Los operadores Movistar, Claro y Entel Perú bloquearon más de 940 líneas telefónicas móviles que eran utilizadas alrededor de la cárcel de Chiclayo, en el distrito de Picsi, con fines delictivos. Según el Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), tanto los equipos como las conexiones fueron inhabilitados, tras coordinar con la policía y el Instituto Nacional Penitenciario (INPE).
“Amparados en un decreto supremo, Osiptel utiliza criterios confidenciales para disponer el bloqueo de los equipos y líneas celulares, presuntamente usados para actos ilegales”, dijo Luis Zambrano Cárdenas, jefe de Osiptel en Lambayeque.
En lo que va del año, dicha entidad bloqueó 1.000 líneas telefónicas móviles en la región. De ellas, 944 operaban en el entorno del penal de Picsi, donde si bien se cuenta con bloqueadores de telefonía para comunicaciones dentro del penal, persiste un área poblada en el exterior donde las llamadas aún son factibles a determinadas horas.
La posibilidad de que alguna de las líneas suspendidas hubiera servido para comunicarse con reclusos dentro del penal fue descartada por Henry Cotos Ochoa, jefe del INPE Norte.
“Las llamadas extorsivas que peligrosos delincuentes realizaban desde la cárcel de Chiclayo se neutralizaron con la instalación de ocho torres de bloqueadores en puntos estratégicos del recinto”, aseveró Cotos.
El secretario técnico del Comité Regional de Seguridad Ciudadana, Carlos Balarezo Mesones, afirmó a El Comercio que las extorsiones en Lambayeque habrían disminuido en casi 50% por la instalación de los bloqueadores provisionales.
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