La transformación digital de las universidades va más allá de transmitir clases por Internet. Con una generación de estudiantes más cercanos a los medios digitales, empresas que requieren nuevas competencias y una sociedad en constante cambio, la adaptación de la educación superior a las nuevas tecnologías con calidad es una necesidad.
Esta fue una de las conclusiones del congreso Los Futuros de la Educación Superior, organizado por la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) y la escuela de negocios Neumann, que entre el jueves y viernes reunió a expertos en educación superior nacionales e internacionales en mesas de debate y conferenciar.
En dos días, se debatió sobre la digitalización, nuevas enseñanzas para nuevas necesidades, empleabilidad, contribución de las universidades al desarrollo urbano y territorial de las regiones, autonomía y rendición de cuentas y la relación de la educación superior con las empresas.
—Simbiosis—
Durante la mesa “Universidad, sociedad y empresa: redefinir las relaciones”, Gabriel Miró Quesada, presidente del directorio del Grupo El Comercio, señaló que luego de que la pandemia haya roto muchos paradigmas sobre la virtualidad queda pendiente mejorar la relación entre la educación superior y las empresas. “La pandemia forzó el acercamiento que era totalmente necesario. Ahora se tiene que lograr una simbiosis que genere valor para los objetivos de ambas partes y de la para la sociedad”, dijo.