El desborde de los ríos e inundaciones, como consecuencias de las intensas lluvias entre el 20 al 24 de febrero han afectado a 1.130 hectáreas de cultivos de agrícolas, según un informe preliminar, en las provincias de Tahuamanu y Tambopata en la región de Madre de Dios, dijo el ingeniero Carlos Ortega Molleda, director regional de agricultura.
Las precipitaciones fluviales han inundado las parcelas agrícolas, afectando cultivos agrícolas en San lorenzo del distrito de Tahuamanu, en el distrito de Iberia, de la provincia de Tahuamanu, en la zona de Santa Rosa, comunidades de Unión progreso y otras en el distrito de Inambari, en el distrito de Laberinto de la provincia de Tambopata, y en la zona de colorado del distrito de Madre de Dios, de la provincia del Manu. Los cultivos afectados son plantaciones de cacao, sembríos de arroz con sistema de riego, también plantaciones de yuca, maíz, plátanos, piña, que representarían el 30% de los cultivos agrícolas en la región de Madre de Dios.
Según el reporte de los técnicos de las agencias agrarias, los cultivos llevan más de tres días inundados. Indicaron que cuando culmine la etapa de lluvias, los suelos empezarán a calentarse y habrá un cambio brusco de las temperaturas, con la aparición de las plagas y enfermedades, en las plantaciones de cacao, arroz, papaya, yuca, copuazu, y frutas. Esto traerá consigo la perdida de cultivos, y la cifra de afectados podría pasar a perdidas , explico el Ing. Carlos Ortega Molleda, Director regional de agricultura.
El 2023 el sector agrícola ya fue afectado, cuando en los meses de agosto y setiembre hubo una deficiencia hídrica, que dañó cultivos reduciendo la producción para el 2024. “Con esta afectación por las lluvias a las plantaciones agrícolas, las perdidas serán grandes para el sector agrario en esta región” dijo el Ing. Carlos Ortega Molleda.
Se requiere asistencia técnica para mitigar el problema, y el apoyo de entidades como Senasa. “La atención del seguro agrario del Ministerio de agricultura y riego”, exigió Ortega Molleda.
Ayuda del Gobierno central
Gobierno Central a través del INDECI, trasladó y entregó 8.6 toneladas de bienes de Ayuda Humanitaria alimentaria, para atender a las familias afectadas por inundación en el Distrito de Fitzcarrald, Provincia del Manu, dentro de la Emergencia.
El jefe del Indeci junto al director de Respuesta trasladó más de 4 toneladas de Bienes de Ayuda Humanitaria alimentaria en aeronave C-27J Spartan de la Fuerza Aérea del Perú y otras 5 toneladas que llegaron por vía terrestre, las cuales fueron entregadas al Gobierno Regional y a su vez al Gobierno Local del Distrito de Fitzcarrald encabezada por su alcaldesa María Soto Chaina.
Estas acciones se realizaron en coordinación con el Gobierno Regional de Madre de Dios y el gobierno local, y con el apoyo de las Fuerzas Armadas del Perú (FF.AA.), con el objetivo de tender a más de 150 familias en 7 comunidades nativas afectadas por inundación, en el distrito de Fitzcarrald de la provincia de Manu.
Riesgos por deslizamientos y huaicos
Los deslizamientos, huaicos u otro tipo de movimientos en masa que siguen registrándose en el país, ponen en riesgo de afectación a 260 distritos de la Sierra, según el escenario elaborado por el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (Cenepred) ante el aviso del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), que anuncia la ocurrencia de lluvias de moderada a fuerte intensidad desde este lunes 4 al miércoles 6 de marzo.
Según dicho documento, Ayacucho es el departamento que presenta la mayor cantidad de jurisdicciones (37) en riesgo muy alto, seguido de Áncash (36), Arequipa (18), Apurímac (6), Huancavelica (9), Puno (9), Huancavelica (9), Cusco (4), Lima (4), La Libertad (1) y Moquegua (1).
En tanto, hay 135 distritos de dichos departamentos, además de Huánuco, Junín, Pasco y Tacna que se encuentran en riesgo alto.
Ante esta situación, el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) exhorta a las autoridades de los gobiernos locales y/o regionales revisar que las rutas de evacuación estén despejadas y debidamente señalizadas, para dirigir a la población hacia una zona segura y alejada del cauce de ríos o quebradas.