La familia Guerrero Neira, dueña de la agrupación de cumbia sanjuanera Corazón Serrano, negó rotundamente venir "lucrando" con la muerte de Edita Guerrero y con el delicado proceso judicial que involucra a Paul Olórtiga, el viudo de la artista.
"Desmentimos las versiones que, quizás por falta de información, dicen que los hermanos Guerrero Neira están lucrando con estos acontecimientos. Somos respetuosos del trabajo periodístico y no buscamos imponer la agenda a nadie. Si el público se ha interesado por nosotros, tenemos que decirle que el corazón serrano es fuerte y agradecido", señala un comunicado.
De la misma manera, la familia rechazó querer apropiarse de dinero de Paul Olórtiga (vía una reparación civil).
"La agrupación es una E.I.R.L. y no una sociedad anónima. Esto quiere decir que es imposible que busquemos quitarle algo a Paul bajo ninguna circunstancia", continúa.
Finalmente, la agrupación reitera que desea el mejor presente y futuro para los hijos de la pareja Olórtiga Guerrero. "Jamás hemos dejado de estar pendientes de nuestros sobrinos porque son el recuerdo más preciado de nuestra hermana y jamás estarán solos".