Piura: Los socorristas que domaron el cerro Negro [Crónica]
Piura: Los socorristas que domaron el cerro Negro [Crónica]

La primera vez que el técnico de segunda FAP William Córdova Li entró al cerro Negro tuvo que regresar de inmediato. El frío era intenso, los vientos huracanados, el camino fangoso. No llevaba equipamiento especial para incursionar en esa montaña gélida de la comunidad de Yanta, en Ayabaca. Junto a otros cinco socorristas de la policía no avanzaron ni 500 metros. Volvieron para replantear la estrategia y equiparse mejor.

“No soportamos el agua helada. Todo el terreno era fangoso. Si nos quedábamos más tiempo, podía darnos hipotermia. Bajamos al río y recuperamos fuerzas para llegar hasta la comunidad”, relató Córdova, quien ubicó los cuerpos de Aleida Dávila y Orlando Pastrana, dos de los tres trabajadores de fallecidos en el cerro Negro.

Su vasta experiencia en el Vraem y en regiones gélidas lo hizo volver. Ya no con carpas de playa, ni con botas para el llano, sino con equipos especiales para bajas temperaturas. Junto a su colega, el suboficial de segunda FAP William Alexander Mena Nieves, localizaron el cuerpo de Aleida Dávila en una segunda incursión.

“Ella era nuestro objetivo principal. Para ver si estaba viva o muerta. Cuando la hallamos abrimos el camino para la extracción. Demoramos como tres días para ubicarla y traerla. Después fuimos relevados por el mayor Medrano, quien halló a Tacure. Luego volvimos para extraer a ambos, y fue cuando hallamos a Pastrana, a solo 230 metros de Aleida”, comentó.

Héroes de las alturas
El comandante general de la Primera División del Ejército Peruano, Manuel Gómez de la Torre, condecoró ayer a Córdova y otros 23 miembros del Ejército, la Policía Nacional y la Fuerza Aérea que participaron en la recuperación de los cadáveres. Destacó el esfuerzo conjunto de dichas instituciones para conseguir el objetivo.

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