“No podemos pensar que un narcotraficante que estuvo 10 años o 15 años preso se resocializó. Lo usual es que siempre regrese al negocio de las drogas. Parte de la condena debería ser inhabilitarlo para el desempeño de cualquier cargo público”, sostuvo a El Comercio el analista el temas de narcotráfico Rubén Vargas.
A pesar de los recientes hallazgos de droga en vehículos vinculados a partidos políticos –400 kg en uno de Fuerza Popular en Barranca y 200 kg en uno de Alianza para el Progreso en Ayacucho–, Vargas asegura que la incidencia del narcotráfico en el gobierno aún no podría compararse a lo que se vivió en México y Colombia.
“El Perú es un país productor de cocaína. Los cárteles internacionales no están instalados en nuestro país, a pesar de que somos el primer productor. Somos productores para un mercado internacional. ¿Cuál es la naturaleza de los narcos peruanos? Básicamente son intermediarios en alguna parte de esta cadena del negocio, en pequeñas cantidades”, dijo.
Fuerza Popular aún no define el retiro de su candidato en Barranca, Alberto Tapia, días después de que se hallara cocaína en una camioneta de su propiedad. En el caso de Ayacucho, Alianza para el Progreso niega cualquier vínculo con el auto donde se halló droga, pese a que tenía banderolas del partido.