Las actividades vinculadas a cultivos ilícitos y el narcotráfico han impactado y afectado de modo negativo en la pérdida de los bosques, en especial en los planes de manejo que se ejecutan en las concesiones forestales y las comunidades indígenas de la región Ucayali.
La situación es crítica para todo el sector forestal que trabaja legalmente en la región, cuya cadena productiva ha sido golpeada en el 2021, según reveló un informe difundido el 15 de febrero último y que fue presentado por el Gobierno Regional de Ucayali a través de la Gerencia Regional Forestal y de Fauna Silvestre (GERFFS).
El documento N°006-2022-GRU-GGR-GERFFS-SGMMAFFS-AMC/GMTL alertó sobre la pérdida de cobertura boscosa para el año 2021, y reveló los índices de afectación a los bosques en Ucayali en las diferentes categorías territoriales que la conforman, sobre las modalidades de aprovechamiento forestal y de fauna silvestre, así como en las áreas naturales protegidas, territorios comunales, y sobre la jurisdicción de Pueblos Indígenas en Aislamiento y Contacto Inicial (PIACIs).
Entre los hallazgos más resaltantes se encontró que, para el año 2021, hay una pérdida de 31,543.29 hectáreas (ha) de bosques en toda la región Ucayali. Ello significa una disminución de pérdida de cobertura boscosa de 15,700 ha con respecto al año 2020.
Las categorías territoriales más afectadas son los bosques de producción permanente (donde se encuentran las concesiones forestales), donde por sus características y aptitudes se realiza la producción intensiva y de mediana escala de madera y de otros productos forestales. También han sido afectados los territorios de las comunidades indígenas.
Los bosques de producción permanente y los territorios comunales representan juntos más del 75% del total de bosques perdidos. Además, se supo que en 97 concesiones forestales vigentes se concentran afectaciones sobre más de 11,500 ha y también en 97 comunidades nativas con planes de manejo, se han afectado más de 2,500 ha.
Desde el 2001 a la actualidad, más de 100,000 ha de bosques en territorios indígenas fueron afectadas. Las comunidades nativas más afectadas por efectos de actividades ligadas a cultivos ilícitos están en la provincia de Padre Abad, Sinchi Roca y Sinchi Roca II.
En esta misma provincia se ubica la Reserva Indígena Kakataibo, la cual fue creada para dar protección al pueblo indígena en aislamiento y contacto inicial del mismo nombre y que se encuentra seriamente amenazado.
‘Narcopistas’
En un sobrevuelo realizado a inicios febrero del 2022 por la Gerencia Regional Forestal y de Fauna Silvestre, se observó la reciente creación de dos presuntas narcopistas en estos territorios, con dimensiones de 800 a 1500 metros de longitud por 40 a 80 metros de ancho y con presencia de infraestructura y personas en el sitio (avistadas en el sobrevuelo) dedicadas, al parecer, al narcotráfico. Solamente en año 2021 se reportaron 11 presuntas narcopistas recientemente abiertas en la jurisdicción ucayalina.
El gobernador regional, Ángel Gutiérrez Rodríguez, exhortó al Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (Osinfor), que preside la secretaría técnica de la Comisión Multisectorial Permanente de Lucha contra la Tala Ilegal y al Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre Silvestre (Seror), que encabeza el Sistema Nacional de Control y Vigilancia Forestal y de Fauna Silvestre para, de manera urgente, elaborar una agenda de emergencia multisectorial en salvaguarda del patrimonio forestal y de fauna silvestre en Ucayali.
Advirtió que, si no erradican este problema, Ucayali se podría convertir en el “segundo Vraem del Perú”.