Falta de comprensión de las funciones gubernamentales, diálogo escaso y recursos insuficientes. Para Fabiola Muñoz Dodero, directora del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), esas características han entrampado el reconocimiento de los derechos de pueblos nativos sobre sus tierras, tal y como sucedió con Saweto, en Ucayali. La comunidad, que a inicios de mes perdió a cuatro de sus líderes, dirigidos por Edwin Chota, contaba desde abril del 2013 con un informe favorable, emitido por el propio gobierno regional. No obstante, este no se implementó.
— Si la región Ucayali emitió el informe a favor de Saweto, ¿qué impidió que se ejecutara?
Muchas regiones aún no tienen claro qué funciones les competen. Piensan que, como hay concesiones forestales maderables, nosotros debemos hacernos cargo.
— Pero la titulación compete a las regiones.
Así es. En caso de superposición entre una comunidad y la concesión maderable, la exclusión de esa área, para titularla, compete a la región. Pero, si se busca titular un área dentro de bosque donde no hay concesiones, pero sí comunidades, Serfor hace un redimensionamiento y luego la región titula.
— ¿Qué se entendió mal en el caso de Saweto?
[Edwin] Chota y la comunidad la tenían clara. Ellos tienen dos concesiones [según Ucayali, por 66 mil hectáreas] superpuestas en sus 80 mil hectáreas, por lo que pedían una exclusión. La región, después de dos negativas, finalmente accede el 3 de abril del 2013. El documento fue firmado en la Dirección de Saneamiento Físico Legal de la Propiedad Agraria. Nada impedía al Gobierno Regional de Ucayali darle a Saweto el título de sus tierras.
— ¿Es posible que haya habido otros intereses que frustraran la titulación de Saweto?
Es innegable que el negocio de la madera mueve mucho dinero y corrompe funcionarios. Por eso la presidenta del Consejo de Ministros, Ana Jara, ha exhortado a la región a revisar sus propios documentos. Si todo sale bien, para octubre Saweto ya debe tener su título.
— ¿Serfor tenía forma de supervisar ese trámite?
Nos reunimos con Chota en julio de este año. Llamamos a la región para saber del caso y comunicamos a Osinfor [Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre] sobre las denuncias de tala ilegal. Se acordó ir en setiembre para una visita de campo, pero...
— El 1 de setiembre asesinaron a Edwin Chota.
Pese a eso, Osinfor viajó. En su informe del 8 de este mes, se concluye que hay evidencia de que Eco Forestal Ucayali y la concesión de Edwin Ramiro Barrios Galván están aprovechando especies no autorizadas, sin plan de trabajo, y que mantienen deudas por su actividad.
— Es decir, están talando de manera ilegal.
Hay indicios de incumplimientos que Osinfor deberá oficializar y sancionar. Lo importante es que el Estado ha llegado, tarde, pero llegamos a la comunidad.
— Si las regiones tienen problemas para entender su rol, y corroborar una denuncia de tala toma años, ¿cómo se protegerá a las demás comunidades con el problema de Saweto?
Estamos impulsando una reforma de la gestión del Estado. Algo favorable será la transparencia de la información. Si una concesión es pública, y puede verse en Internet, por ejemplo, será más sencillo fiscalizar.
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