Un 70% de la población en Perú no suele comprar libros impresos ni digitales

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Así, aunque en octubre del 2020 fuera promulgada la Ley N° 31053, conocida como la Ley del Libro, la exoneración del IGV en los precios de las publicaciones no ha tenido, como vemos, un impacto significativo en la compra. Además, la asistencia a ferias del Libro no supera el 15% y el uso de bibliotecas municipales empezó a caer en casi un 50% entre el 2018 y el 2019.

Desafíos y pendientes

En diálogo con El Comercio, el titular de la Dirección del Libro y la Lectura del Ministerio de Cultura, Leonardo Dolores, destacó a las bibliotecas municipales como un puente para acercar a la ciudadanía al consumo de publicaciones. Explicó que el ministerio viene impulsando el abastecimiento de una mayor oferta bibliográfica para estos espacios.

“Desde el 2020, trabajamos en la compra de libros para nutrir las bibliotecas municipales y los espacios de lectura. Muchos municipios carecen de una oferta interesante de libros por el poco presupuesto que se maneja en ese aspecto. Lo mismo en el 2021, aunque con menor presupuesto, y lo haremos igual este año. Hemos visto necesarios dos componentes: la variedad de libros y la asistencia técnica dentro de los servicios bibliotecarios. Con esta última se garantiza una mediación con un lector potencial. Es una tarea y un esfuerzo que estamos viendo junto a la Biblioteca Nacional”, señaló.

En la actualidad, de los 1.845 distritos del territorio peruano, solo 447 cuentan con bibliotecas. Para 2016, la cifra era de 686 y para el año siguiente, de 556. Consultado sobre la progresiva reducción de estos servicios en las municipalidades, Dolores indicó que las brechas son notorias, pero que el enfoque de trabajo está en mejorar los servicios ya disponibles.

El funcionario anunció que el sector publicará los resultados de un estudio con un panorama más detallado sobre el comportamiento lector en el país. “Estamos en pleno proceso de la Encuesta Nacional de Lectura, la cual nos dará cifras sobre el comportamiento lector de los peruanos y peruanas a nivel nacional. Es la primera vez que se tendrán estos datos y los tendremos a fin de año”, expresó.

De otro lado, el presidente de la Cámara Peruana del Libro (CPL), Willy del Pozo, anota que la pandemia del COVID-19 afectó el despliegue acostumbrado de la Feria del Libro de Lima y de otros eventos similares en los últimos dos años. A partir de mediados del 2021, con la reanudación de actividades presenciales, la CPL organizó cinco ferias en diferentes distritos limeños. La afluencia de público estuvo entre los 13.400 (en el caso de la feria del Libro de Magdalena) y 52.000 (en el caso de la feria Ricardo Palma).

“Ahora, cuando las puertas se han abierto, estamos viendo un resurgimiento en la participación. Si bien el golpe que nos dio la pandemia fue muy fuerte, no fue un golpe mortal. Se tuvo que afrontar con apoyo de las instituciones públicas y de la propia CPL. Sobre qué ocurrirá con la lectoría en el país, creo que podremos tener una muestra importante con la participación en la Feria del Libro de Lima y las ferias venideras”, dijo.

Del Pozo añadió que se debe seguir fortaleciendo bibliotecas, eventos, instituciones y regulación. Consultado sobre los estudios que puedan medir a mayor escala el interés y el consumo de libros en el Perú, reconoció que las mediciones siempre tienen áreas grises debido a la dura competencia contra la piratería.

“La piratería hace muchísimo daño [al ecosistema de producción bibliográfica] y se ha incrementado a través de los ejes virtuales también. Hemos tenido reuniones con el Indecopi y estamos en proceso de una propuesta”, sostuvo.

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