Abogados de Morote y Liendo aseguran que pagarán la caución

En medio de empujones entre policías, periodistas y gente que lo insultaba y le gritaba “asesino”, el cabecilla terrorista Osmán Morote ingresó ayer al inmueble de 600 m2 ubicado en la calle Eucaliptos 586, Chaclacayo, donde cumplirá detención domiciliaria.

Esa medida judicial, que incluye a la senderista Margot Liendo Gil, fue emitida el martes 17 por el Colegiado A de la Sala Penal Nacional, pero recién se pudo ejecutar ayer luego de que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) recibiera el informe policial de viabilidad de la disposición del tribunal.

Morote y Liendo, quienes hace cuatro años cumplieron su condena de 25 años de prisión por terrorismo, afrontan tres procesos judiciales (atentado de Tarata, matanza de campesinos de Soras y financiamiento del Movadef) en los que se ha vencido el plazo de la prisión preventiva.

Morote no dio declaraciones ni al momento de abandonar el penal de Ancón ni cuando ingresó al domicilio de sus familiares en Chaclacayo. Los que sí hablaron fueron los vecinos que protestaron. Ellos dijeron que la presencia del que fuera el número dos de Sendero Luminoso traerá inseguridad a la zona.

Además, se quejaron de que el inmueble no tiene el cerco perimétrico completo, por lo que hay riesgo de que el subversivo pudiese salir de la casa por atrás.

En la cochera de la vivienda, se pudo ver dos autos. Además, la familia cuenta con otros dos vehículos con los cuales harían movilidad escolar.

El abogado de Morote, Raúl Bonet, indicó que este cumplirá el pago de la caución de S/10 mil dentro del plazo de cinco días hábiles dictaminado por el tribunal.

Mauro Apaico, abogado de Margot Liendo, manifestó que su cliente también se ha comprometido a abonar la caución antes de que se venza el plazo.

La ex integrante de la cúpula senderista tampoco quiso declarar cuando llegó al inmueble ubicado en Los Nogales 497, Santa Anita, donde cumplirá el arresto domiciliario.

Su abogado dijo que, aunque no está totalmente de acuerdo con la medida, ella está dispuesta a cumplir las disposiciones judiciales.