Fernando Vivas

Los generales deliberaron antes que ella. El 7 de diciembre Dina Boluarte estaba en la luna y en pijama. “Me cambié, puse mi pijama en la mochila. No sabía a dónde ir. Pensé que mi casa estaba sitiada por la policía, el Ejército. Pensé que el Ejército había rodeado mi casa porque en un golpe interviene el Ejército”, ha contado la presidenta en “Panorama”. Los amigos que le dijeron ‘sal de tu casa’ tras oír a Pedro Castillo pronunciar su golpe de estado, habían visto muchas películas conspiranoicas. Su miedo era infundado. Los militares y los policías no le iban a tocar ni un pelo a Dina Boluarte; por el contrario, no se separarían de ella a partir de entonces. Ya habían deliberado –en ese día en que tuvieron que hacerlo- y decidido que no iban a apoyar el golpe de Castillo. La policía fue más lejos y lo detuvo en flagrancia por quebrar el orden constitucional.