Es la víspera de Navidad y Roque Benavides abre espacio en su agenda. En una hora irá a almorzar con todos los trabajadores del Colegio de Ingenieros; es decano del Consejo Departamental de Lima. Eso siempre lo llena de orgullo: decir que es ingeniero y que estudió en la UNI. También lo llena de fuerza hablar de la minería. “Roque Benavides no se va del Perú. Me quedo aquí y vamos a seguir trabajando. Nunca es más oscuro que cuando va a amanecer y yo creo que el Perú tiene grandes posibilidades”. Así me recibe, con optimismo y con fe. Está convencido de que todos debemos recapacitar y pensar en lo que hicimos mal para volver a comenzar.
—Si hasta hace un tiempo decíamos que con el Ejecutivo andábamos perdidos, hoy se añade el descalabro del Congreso y ahora el Ministerio Público, quiere decir que los poderes del Estado están en un absoluto estado de emergencia y la incertidumbre es absoluta, ¿a dónde vamos a parar?
Hay mucho desorden, mucha confusión para quienes no somos abogados. En el tema de la fiscalía yo me perdí. ¿Todos contra todos? ¿Qué buscamos? El Congreso tiene todo el derecho a evaluar a los miembros de la Junta Nacional de Justicia (JNJ), pero lo que me sorprende es que se pueda pensar que todos deben irse a su casa. Cuando me dicen que la magistrada Inés Tello excedió la edad, me suena razonable que se vaya a su casa. Eso nos pasa a todos y es saludable dar espacio a la gente más joven. El tema de la renovación es muy importante, pero de ahí a decir que todos los miembros tienen que irse a su casa es excesivo. El Congreso de la República debería evaluar mejor [la situación].
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—Renovación Popular está pidiendo un pleno extraordinario para ver la remoción, Fuerza Popular también se ha sumado...
Hay que meditar las cosas, evaluar a las personas. El respeto al ser humano es muy importante. Al Congreso le toca evaluar y fiscalizar. Ahora bien, cuando me dices que el Ejecutivo también está muy mal, no estoy de acuerdo. Hoy existe mucho más orden que en la época de Castillo. Se puede mejorar el Gabinete, pero el nivel de los ministros y del gobierno comparado con la gestión anterior es muy superior.
—Usted se sentía extremadamente decepcionado con el ministro de Energía y Minas.
¿Cuál de los ministros?
—El pasado y el actual.
El señor Castillo tuvo cuatro ministros de Energía y Minas y ninguno de ellos daba la talla. El actual ministro es un hombre que viene de las canteras sindicales de Petro-Perú. Es un hombre que seguramente algo de petróleo conoce y ha sido muy constructivo en cuanto al sector eléctrico y al sector minero. Hay que reconocer una mejoría en el sector, pero podría ser aún más bueno, obviamente.
—¿No cree que este gobierno sea antiminero?
No. Sería muy injusto decir que es un gobierno antiminero. Estoy hablando de incompetencia y este gobierno es mucho menos mediocre que el anterior, con todas las limitaciones que tiene que tener, porque hay que entender que la señora Boluarte fue vicepresidenta de Castillo, ¿no? Tampoco la tiene gratis, pero tiene que marcar distancia.
—¿Hemos desperdiciado nuestro enorme potencial con el cobre?
Claro que sí. La gente no se da cuenta de una cartera de 48 proyectos mineros que tiene identificados el Ministerio de Energía y Minas, por US$57.000 millones que costaría construirlos y desarrollarlos. De esos 48 proyectos más de 30 son de cobre y, por lo tanto, el potencial de producción de cobre del Perú es enorme. El presidente García solía decir: “Hay que ganarle a Chile en producción”. Chile produce 60 millones de toneladas de cobre al año; nosotros producimos 2,7 millones de toneladas. Si nos pusiéramos las pilas, podríamos ganar muchos más proyectos de cobre que Chile y podríamos alcanzarlo y superarlo.
—¿Por qué es tan importante el cobre?
Porque es el metal del medio ambiente, el metal del futuro, el metal de los carros eléctricos. Estos consumen cuatro veces más cobre que los carros a combustión y, por supuesto, las energías alternativas –eólica y solar– también consumen cobre. Si es que seguimos con este nivel de producción, a nivel mundial en ocho años no habrá suficiente cobre en el mundo y, por lo tanto, cuando hay más consumo que oferta el precio sube. En el caso del cobre, es una oportunidad y el Perú es el país que más proyectos de cobre tiene en el mundo. Necesitamos poner en valor nuestros recursos y no solamente los mineros: la agroindustria, industria manufacturera, turismo, construcción.
—Regresemos un poco a la inversión. Son US$57.000 millones que no le costarán al Estado...
La inversión privada que es lo que impulsa el carro de la economía. Hay un dato que es importante repetirlo hasta el cansancio: en el Perú, del 100% de la inversión, el 20% es inversión pública del Estado y 80% es inversión privada. De ese 80%, el 80% es inversión nacional de peruanos y 20% es inversión extranjera que viene con nuevas tecnologías, con nuevos procesos que hay que promover, que hay que respetar.
—¿Por qué cree que Dina Boluarte y Alberto Otárola no han reaccionado frente a este plato servido?
Están haciendo un esfuerzo. El solo hecho de que a Perumin asistiera el presidente del Consejo de Ministros, el ministro de Energía y Minas, la ministra del Ambiente, la ministra de Cultura, que fuera gente del gobierno, demuestra con un lenguaje corporal que tiene el interés de promover el sector.
—Si pudiera sentarse con ella 10 minutos, ¿qué diría?
Que debe promover la inversión, porque de ella viene la lucha contra la pobreza y la creación de puestos de trabajo. Debe darle oportunidad a los jóvenes, que en su mayoría están emigrando fuera de nuestro país.
—¿Cree usted que la JNJ hizo bien al suspender a Patricia Benavides? ¿Cree que fue demasiado apresurado y prácticamente un complot político, como dice ella?
No soy abogado, pero el debido proceso me hace pensar que tiene derecho a la defensa. Yo tengo que reconocer, además, que soy un poco parcial con Patricia Benavides, porque conozco a su familia desde hace 50 años en Huancavelica. Ella, su padre y su madre, a los cuales yo he conocido, fueron muy amigos de mis padres. No es mi pariente directo, pero la conozco a ella y a sus hermanas. Es más, fui testigo hace más de 15 años, del matrimonio de Enma que hoy está bajo sospecha.
—La fiscalía ha dicho que Benavides lidera una organización criminal y un brazo de esa organización sería Hernán Garrido Lecca y el abogado Hauyón...
La verdad es que no necesito ser abogado para sorprenderme de que puedan estar coludidos los siete miembros de la JNJ. Sería el único caso en el Perú donde hay una coincidencia total por un lobby y eso es imposible. Que se investigue a todos, que les den la oportunidad de defenderse.
—¿O ha sido el intento del Partido Aprista de volver a ocupar el Ministerio Público?
No tengo la menor idea.
—Pero sí tiene la menor idea de que, en el pasado, el Apra tenía más que un pie en el ministerio...
En el Poder Judicial en general, yo creo.
—Lo reconoce, entonces.
Muchos abogados apristas en el pasado, hace 30 años, tenían mucha influencia. Con el liderazgo, por supuesto, de gente muy honorable como el doctor Haya de la Torre, así que que haya un tercio de la población que haya sido aprista y que en el Poder Judicial trabajara un grupo de apristas no quiere decir que el partido copara el Poder Judicial.
—Muchos analistas argumentan que al Apra le convenía mucho tener el control de la investigación por el Caso Odebrecht. Recuerde que la plana mayor de su partido está metida en esta investigación por la campaña...
Como dijo el doctor Nakazaki: los procesos judiciales son individuales. No me pida que haga espíritu de cuerpo con los procesos penales que pueda tener algún individuo. No tengo rabo de paja y no tengo por qué cargar con los procesos, pero sí digo que tiene que haber debido proceso y derecho a la defensa. En nuestro país ya no existe presunción de inocencia sino de culpabilidad, y eso es serísimo y peligroso.
—¿Hernán Garrido Lecca es su amigo?
Lo conozco.
—Él me ha dicho en una entrevista que hemos llegado a bajar la valla del allanamiento, a tal extremo que ya no se exige corroboración. Con dos testimonios pueden allanar a cualquiera y eso, básicamente, es indefensión. ¿Está de acuerdo?
En la línea con la presunción de inocencia, yo no puedo creer que al señor Kuczynski le tomen todos sus inmuebles. Yo conozco un inmueble en Cieneguilla que lo incautaron al comienzo y, por supuesto, lo dejaron abandonado. Se han robado las puertas, las ventanas, se han robado los sanitarios. El local está deshecho y todavía no se le ha probado nada. Es el colmo.
—Por eso muchos dicen que ya vivimos en un Estado fallido...
Estamos en problemas muy serios y muchos no podemos confiar en nuestro Estado. Pero hay que analizar lo que ha funcionado mal. Decir que es un Estado fallido, no. Es exagerado. Pero sí tenemos un Estado ineficiente que no satisface las demandas de la población.
—¿Y cómo se sale de esto?
Hay que reestructurar todo. La reforma del Estado. Hay que hacer ‘copy and paste’ de otros sistemas que sí funcionan.
—Pero eso está en manos de un Parlamento que solo ve por sus intereses...
Pero es un Parlamento que es elegido por el pueblo del Perú y la próxima tenemos que ser más cautos y responsables a la hora de elegir. Tenemos que ser autocríticos y reconocer que hemos elegido muy mal.
—En este escenario, la izquierda plantea adelanto de elecciones con cambio previo de la Mesa Directiva del Congreso.
Yo creo que el sistema democrático nos ha dejado a la señora Boluarte como presidenta y debe terminar su período. El Congreso y la prensa deben continuar fiscalizándola y, por supuesto, insistir en que actúen adecuadamente. La democracia se basa en partidos políticos y la reforma de Vizcarra no ha funcionado.
—¿Qué piensa hoy de Vizcarra?
Que es una gran decepción. A mí, personalmente, me mintió. Cuando entró de presidente le dije que se debía sacar Tía María adelante y me contestó que esperara que terminaran las elecciones regionales del 2018. Después, salió el audio donde hablaba con el gobernador Cáceres diciéndole: “No te preocupes, cholito, que no esto no sale de ninguna manera”. Una gran decepción.
—¿Está de acuerdo con la excarcelación de Fujimori?
Un hombre a los 85 años, con la salud tan deteriorada, debe estar en su casa. No podemos esperar que los presidentes mueran en la cárcel, eso también nos desprestigia.
“Tenemos que buscar candidatos y políticos que sean decentes”
—A la luz de los años y de los hechos, ¿cree que la fiscalía ha cometido abusos con los políticos?
[José Domingo] Pérez y [Rafael] Vela han investigado largos años y hasta hoy no han presentado ninguna denuncia, por ejemplo, contra Kuczynski. Justicia que se demora no es justicia. En este sentido podemos decir que la ineficiencia de la fiscalía es muy injusta y muy dañina, porque se juega con la libertad y con la honra de la gente.
—Pero sí existen sospechas que la fiscalía tiene que investigar.
Obviamente, pero la prisión preventiva se ha tornado perversa. No tiene sentido que exista. Si después sales libre e inocente, ¿te metieron años en la cárcel como si nada pasara? No me parece justo. Yo estoy convencido de que la detención preliminar es casi un mecanismo de extorsión para conseguir colaboraciones eficaces a la medida. La prisión preventiva no debería ser la norma, debería ser la excepción. ¿Quién les paga por los años que estuvieron presos sin acusación?
—Nadie. Pero tampoco nadie paga al pueblo engañado por políticos corruptos que solo llenan sus billeteras con coimas. ¿Quién nos indemniza a quienes creemos en este sistema democrático imperfecto?
Tenemos que buscar candidatos y políticos que sean decentes y ahí cumple un rol fundamental el voto popular y responsable. ¿Somos conscientes de por quién votamos? En el 2024 el Apra cumple 100 años de fundado y creo que hay fortalecer los partidos políticos, presentando a los mejores candidatos, a los mejores cuadros. Ojalá que el PPC se inscriba y que Acción Popular resuelva todos sus problemas.
—¿Necesitamos un Milei?
Necesitamos reformas en el Perú y Milei sí es un político con una gran solidez. Estoy de acuerdo con él en que no puede haber 19 ministerios. No hay forma de que un gobernante alterne con 19 personas que le reportan. Yo también apuesto a reducir ministerios.
—¿Se equivocó Jorge del Castillo al aceptar la defensa de la suspendida fiscal de la Nación?
Jorge del Castillo, además de dirigente aprista, es abogado de profesión y no tiene por qué limitarse a nadie el ejercicio de su profesión. Yo no lo hubiese hecho, pero él consideró, no sé con qué criterio, que podía defender a la patria.
—¿Usted no lo hubiera hecho porque se prestaba a suspicacias? Recuerde que él está siendo investigado.
El conflicto de intereses pesa mucho en mis decisiones. Quién sabe, quizá la formación en mi hogar me ha hecho siempre pensar en esos términos, pero es delicado que él siendo investigado en el Caso Odebrecht asuma esa defensa.
—¿Se lo ha dicho?
No. Lo estoy diciendo ahora.
—¿Ha pensado en irse del Perú?
Roque Benavides no se va del Perú. Me quedo y vamos a seguir trabajando. Nunca es más oscuro que cuando va a amanecer y yo creo que el Perú tiene grandes posibilidades. Hay que seguir peleándola