Unidad de Investigación
Un reciente informe de la contraloría revela que hubo una “situación adversa” en el servicio de seguridad y vigilancia brindado a la red prestacional Rebagliati de Essalud por el Consorcio Rocer, conformado por Jahir Servis Company y Grupo Security Rocer. Esta última empresa fue fundada por Ángel Rojas Cerrón, militante de Perú Libre y funcionario de la gestión de Carlos Palacios como ministro de Energía y Minas, durante el gobierno de Pedro Castillo.
Como la Unidad de Investigación de este Diario reveló hace dos semanas, el Consorcio Rocer suscribió un contrato con el Seguro Social días después de que su representante Ricardo Benites Zegarra acudiera a la sede central de Essalud para visitar –fuera del horario laboral– a la gerente central de Logística, Mónica Chiong. La licitación, de S/3,5 millones, se obtuvo por contratación directa.
Respecto al servicio brindado como parte de esa adjudicación directa, el último miércoles la contraloría publicó el informe de orientación de oficio 045-2023-OCI, en el que se establecen las siguientes observaciones:
“[…] Se ha identificado una situación adversa que amerita la adopción de acciones para la seguridad y la continuidad del proceso […]. La falta de agentes de seguridad en el Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins en puestos de vigilancia […] genera el riesgo de no preservar la seguridad del personal que labora en los mismos y del público usuario ni la seguridad de los bienes patrimoniales de la entidad”.
Detalles de la inspección
La contraloría registró esa situación adversa luego de recoger información de la Unidad de Servicios Generales del hospital Rebagliati y de las visitas inopinadas que realizó a la institución.
“De la inspección inopinada a diversos puntos de ingresos y salidas internas del Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins, efectuado el día 10 de julio de 2023, se ha constatado que son tres lugares los que no contaron con el servicio de seguridad y vigilancia”, se lee en el documento.
Los puntos a los que se hace referencia son el área de Medicina Interna, ubicada en el cuarto piso; Fracturas y Osteosíntesis, ubicada en el noveno nivel; y Radioterapia.
Consultado por el órgano de control, el jefe de la Oficina de Servicios Generales del hospital Rebagliati, Francisco Obando, indicó que la cantidad de agentes y supervisores de vigilancia es la misma que se estableció en el contrato anterior. “No hay variaciones”, respondió.
Sin embargo, el servidor público precisó que el día de la visita inopinada (10 de julio) “no fueron cubiertos nueve puestos del servicio de vigilancia […] situación [por la] que posteriormente aplicarían las penalidades establecidas en los términos de referencia”.
Esta situación, según la evaluación del órgano de control, “expone a escenarios de inseguridad que podrían afectar la integridad física de las personas y la intangibilidad de los bienes patrimoniales e instalaciones” de la entidad.
La contratación directa
El Consorcio Rocer obtuvo la adjudicación directa para cubrir el servicio de seguridad y vigilancia en la red prestacional Rebagliati por S/3,5 millones.
El proceso de contratación duró una semana.
El lunes 3 de julio, a las 9:50 pm, Ricardo Benites, representante de la asociación empresarial, ingresó a la sede central de Essalud para reunirse con la gerente de Logística, Mónica Chiong, según el cuaderno de ocurrencias de la entidad, al que este Diario accedió.
Cuando fue consultado por El Comercio, Benites desconoció la reunión. “Es algo que se me tiene que aclarar”, señaló.
El 4 de julio se aprobó la resolución de la presidencia ejecutiva 585-PE-Essalud-2023, que dispuso la contratación directa para el servicio de vigilancia en diferentes dependencias del Seguro Social, entre ellas la red Rebagliati.
El miércoles 5 del mismo mes, la Gerencia de Abastecimiento, que depende de la Gerencia Central de Logística, otorgó la buena pro al Consorcio Rocer. El contrato se suscribió dos días después.