Nuestra cancillería respondió a Chile sobre el tema del espionaje con una nota diplomática en la cual señala que “en tanto no se den las satisfacciones del caso, se procederá al retiro del embajador del Perú en Santiago de Chile”. ¿Es un retiro temporal?
El retiro está condicionado a que se den satisfacciones. Normalmente, el retiro es retiro, punto. Indica que la llamada en consulta hecha se va a prolongar.
¿El retiro de un embajador condicionado a satisfacciones es una figura usual?
No. Distinguimos llamada de retiro del embajador. Lo usual es llamarlo y esto se suspende cuando hay las condiciones para que vuelva. El retiro es más definitivo, si se quiere.
¿Si el Perú no se siente satisfecho, rompemos relaciones?
No quiero especular.
Las satisfacciones son: una pronta respuesta que contenga los resultados de la investigación interna en Chile y las seguridades de que el espionaje no se repetirá. ¿Es difícil responder esto para Chile?
Quizá Chile quiera tener un debido proceso y eso pueda tomar un tiempo más. Chile puede reiterar que no avala el espionaje y descartar que se repita. No debería ser difícil, es un asunto de plantear bien las cosas. Entiendo que el Perú ha alcanzado nuevos elementos, Chile tendrá que investigar con esto.
¿Mientras dure la investigación judicial continúa el retiro de nuestro embajador o este puede retornar a Chile cuando se inicie la investigación?
No conozco las expectativas del Gobierno Peruano: si normaliza [la relación] con el inicio de la investigación o si espera el resultado de esta para ver si es satisfactorio o no. Creo que si hay una investigación seria, con órganos competentes advirtiendo que los indicios presentados por el Perú son más que suficientes, podría retornar nuestro embajador. Pero no soy del Ejecutivo.
¿Cuánto tiempo puede durar el retiro de nuestro embajador?
Todo el tiempo que se quiera. No hay leyes. Podría ser largo, aunque no es conveniente.
¿Qué indica un tiempo largo?
Que la molestia es larga.
¿Es deseable?
No. Yo prefiero mantener a los embajadores en su sitio. En principio, no estoy de acuerdo ni con una ruptura de relaciones ni con un retiro definitivo de embajadores. No es conveniente. Hay que mantener niveles de comunicación entre las partes. Los países necesitan conversar, tener diálogo abierto y para eso están los embajadores. Si el espionaje rompiera relaciones, probablemente la Unión Soviética y EE.UU. no hubieran tenido nunca embajadores. En los casos de espionaje a Brasil y Alemania [por parte de EE.UU.], no se retiró a embajadores. La diplomacia está para tener canales de comunicación entre los países por más dificultades que haya en esa relación.
¿Cancelar reuniones es una respuesta enérgica?
Con el retiro de embajadores se crea una figura medio rara, relacionarnos a través de un encargado de negocios que funge de embajador. Esa es una respuesta facilista. Hay otras maneras de mostrar malestar, como cancelar reuniones previstas del 2+2. Puede ser una manera más efectiva.
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