Unidad de Investigación
En la mañana del 22 de mayo del 2021, dos agentes de la Sección Desconcentrada de Inteligencia Antidrogas de Iquitos, con el apoyo del Destacamento Antidrogas (DAD) de Santa Rosa, llegaron en una lancha a la comunidad nativa 28 de Julio, ubicada en la zona del río Yavarí de Loreto, cerca de la frontera con Brasil.
Los dos efectivos habían sido informados de que un narcotraficante conocido como ‘Payuchi’ acopiaba pasta básica de cocaína (PBC) en una de sus viviendas para luego trasladarla por el río hasta la ciudad de Manaos (Brasil). ‘Payuchi’ era considerado uno de los principales exportadores de droga en la Triple Frontera (Perú-Colombia-Brasil), por donde salen hasta 120 toneladas de PBC y clorhidrato de cocaína al año.
Con el fin de detener a ‘Payuchi’, los dos agentes antidrogas habían compartido información sobre el operativo sin mayor detalle con el entonces jefe de la División de Maniobras contra el Tráfico Ilícito de Drogas (Divcmtid), el coronel PNP Vic Cárdenas del Pino, el encargado policial antidrogas en Loreto. Nadie más sabía del operativo.
Aquella mañana del 2021, los agentes ingresaron a una vivienda de la comunidad. Pero ahí solo había una escopeta, municiones y dos celulares en mal estado. A unos metros hallaron un morral rojo con otro celular, el cual luego sería clave en la investigación del caso.
La agenda de 'Payuchi'
La operación fue un fracaso porque no localizaron la droga ni a ‘Payuchi’, quien, según un informante de la Policía Antidrogas, estuvo un día antes en el lugar. Había la posibilidad de que ‘Payuchi’ fuera alertado antes. Esta hipótesis cobró fuerza cuando agentes de la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional (Dirandro) confirmaron que el número del celular hallado en el morral rojo era de José Tello Tantaleán, el nombre de ‘Payuchi’. En la agenda del celular tenía guardados los números telefónicos de algunos jefes de las unidades antidrogas de Loreto que dependían de la división al mando del coronel Cárdenas en el período 2020-2021.
Los dos agentes a cargo del operativo del 2021 tenían claro que, de todos los contactos policiales de ‘Payuchi’, el jefe del DAD de Nauta, el técnico PNP José Ríos Dávila, era el enlace entre los efectivos corruptos y los narcotraficantes.
Los audios de WhatsApp hallados en el celular de ‘Payuchi’ confirman que Ríos se enteró días antes del operativo, del que solo Cárdenas sabía. “[...] Mañana habrá ‘reunión’ [operativo], de pronto te tengo alguna noticia”, le dice Ríos a ‘Payuchi’.
En las semanas siguientes al operativo, agentes de inteligencia antidrogas de Lima confirmaron que Ríos era cercano a ‘Payuchi’ y al coronel. ‘Payuchi’ era padrino de la hija de Ríos. En una fotografía, aparecen juntos. Y en un seguimiento hecho en junio del 2021, Cárdenas está en una reunión en la casa de Ríos.
En la agenda del celular de ‘Payuchi’, hay un número grabado con el apelativo ‘coronel Lucas’. Según la Policía Antidrogas, el número coincide con el del celular que usaba el coronel.
En el aparato de ‘Payuchi’ también aparece el número del técnico PNP José Dantas Ríos, quien era el jefe del DAD de Santa Rosa que apoyó en el operativo de mayo del 2021. En la agenda lo identifican como ‘Dancolin Primo’. El entonces jefe de Departamento de Operaciones Tácticas Antidrogas (Depotad) de Requena, el suboficial Teodoro Ríos Ruiz, está grabado en la agenda como ‘Santosss’. En una conversación por WhatsApp, Ríos le escribe a ‘Payuchi’: “Hola primo, ¿qué tal? ¿Qué pasó? ¿Te desapareciste?”.
Ante las evidencias, Mery Machuca, entonces fiscal antidrogas de Iquitos, abrió una investigación a los policías involucrados.
Como principales implicados están ‘Payuchi’ y Cárdenas, quien a su cargo tenía a 160 agentes distribuidos en cinco DAD y dos Depotad. En total, seis unidades fueron infiltradas por el narcotráfico, según la policía.
Además del coronel y los otros tres efectivos antidrogas mencionados, son investigados el mayor PNP Ralph Ángeles Fiestas y los suboficiales Néstor Ruiz del Castillo, Jack del Águila Aguilar y Jacker Huiñapi Guerra. Todos estuvieron bajo el mando de Cárdenas.
Sobre esta pesquisa, el agente antidrogas Edward Yque, quien participó en el operativo antinarcóticos del 2021, declaró: “Puedo confirmar que el único que sabía de esta información [...], a parte de mí y el técnico Pere, con quien manejaba la información reservada, era el coronel Vic Cárdenas”.
Colaborador eficaz
En agosto del 2021, un colaborador eficaz declaró a la fiscalía que ‘Payuchi’ reunía dinero de organizaciones del narcotráfico para pagar al coronel a través de los jefes de las unidades antidrogas para que permitieran trasladar la droga a Brasil. El coordinador era José Ríos. El colaborador comprometió al personal que trabajaba con el coronel en la Divmctid de Iquitos.
Hay audios que apuntan a que la comandante PNP Carmen Tobies Laulate, segunda oficial de mando en la Divmctid de Cárdenas, sabía de los pagos realizados.
En junio, José Ríos fue detenido, pero por otro caso de narcotráfico. En escuchas legales de ese caso, hay narcos que dicen que Ríos alertaba de los operativos. El mayor PNP Ángeles también está detenido, pero por otro asunto. El resto de policías sigue en actividad.
En mayo del 2022, Cárdenas pasó al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas como oficial de enlace para las operaciones militares conjuntas. El Comercio lo llamó. La persona que contestó dijo que era su abogado y que el caso estaba en investigación. No se logró encontrar a los otros implicados para obtener sus descargos.
Respuesta de la PNP
Sobre este megacaso, el director de la Dirección Nacional de Investigación Criminal PNP, el general Óscar Arriola, afirmó a este Diario que ya hay policías detenidos y que la permanencia del resto de investigados en la institución dependerá de su “estatus jurídico”.
Recalcó que no tiene detalles de la carpeta fiscal del caso, “pero diría que cuando hay [...] policías [implicados] no deben ser reservadas, deben ser públicas para que disuadan a otros funcionarios”. También dijo que la PNP sabe cuándo una “investigación es prolija y cuándo es amañada, en la que se alargan plazos y dilatan diligencias”.
Sospechas sobre las fiscales que investigaron el caso
La investigación al coronel PNP Vic Cárdenas y los policías a su cargo se alargó por más de dos años. Pese a las evidencias encontradas en el celular de ‘Payuchi’ y a la versión de un colaborador eficaz, Mery Machuca y Fiorella Reátegui, las fiscales antidrogas de Loreto que investigaron el caso, solo pidieron declaraciones de los implicados y no dispusieron medidas restrictivas contra los investigados.
‘Payuchi’, considerado por las fiscales cabeza de una organización dedicada al narcotráfico, solo fue citado para explicar su relación con los policías. Dio versiones inconsistentes sobre sus diálogos.
En agosto pasado, por las interceptaciones realizadas por el programa Constelación de la Dirandro al teléfono de Delmar García Cruz ‘Nene’, otro narcotraficante que opera en Loreto, se encontró un diálogo que sugería que ‘Payuchi’ y el técnico PNP José Ríos eran apoyados por una fiscal relacionada con ‘Dayro’, quien sería Dayro Restrepo Vásquez, un peruano-colombiano que vive en Iquitos.
En otra conversación, ‘Nene’ comenta a su socio sobre la ayuda que los investigados reciben por una ‘árbitra’, como los narcotraficantes llaman a los fiscales y jueces.
Según la Policía Antidrogas, Restrepo sería narcotraficante y la fiscal con la que lo vinculan es Reátegui.
Machuca y Reátegui ya no investigan el caso (ahora está a cargo del fiscal Luis Alberto Paz de la Cruz).
En diciembre último, por “necesidades del servicio”, Machuca pasó a la fiscalía de Tarapoto, mientras que Reátegui fue a una fiscalía antidrogas del Callao.
Según fuentes de El Comercio, Machuca es investigada en la fiscalía anticorrupción por encubrimiento. Además, Control Interno del Ministerio Público analiza un informe elaborado por la Dirandro sobre la actuación de Machuca.
Un cuestionamiento a ella es su relación con el suboficial PNP Gerlis Olivera, quien trabajaba como agente operativo para el coronel Cárdenas en Loreto cuando este último era investigado de forma reservada por la fiscal. Adicionalmente, se investiga el departamento que ella adquirió en agosto del 2021 por un valor de US$58 mil.
Machuca dijo a El Comercio que por su función investigó a “muchas personas” y que desconocía sobre las investigaciones en su contra.
Este Diario no logró localizar a Reátegui antes del cierre de este informe en su edición impresa.
El domingo 13, a través de un mensaje de WhatsApp, respondió: “[...] Yo sigo trabajando en el Ministerio Público, qué pena que vendan información falsa de personas que solo han realizado su trabajo de forma impecable y ahora buscan relacionarnos con delincuentes que nosotras mismas hemos estado investigando, no tiene lógica”.
El Comercio tenía información de que Reátegui había renunciado hace un mes al Ministerio Público.
El lunes 14, también a través del WhatsApp, Reátegui afirmó a este Diario que su “rotación a otro distrito fiscal […] fue de [los] fiscales provinciales y adjuntos provinciales a nivel nacional porque es parte de la política institucional de la fiscalía especializada antidrogas”. Luego precisó que tomó “la decisión de renunciar a mi cargo como fiscal antidrogas” por un tema familiar.
También negó conocer a la “persona que responde al nombre de Dayro [Restrepo] Vásquez”. “Me relacionan con ese tipo por el simple hecho de que existe un audio en el que mencionan sobre un “árbitro” que podría ser (fiscal o juez), según el criterio y análisis de la policía de inteligencia, pero nunca se me menciona de manera directa, ni existe algún tipo de evidencia que me involucre con esta supuesta persona”.
Sobre la indagación fiscal, dijo que “era un caso reservado en el cual se abrió investigación en mérito a un informe de inteligencia y, por ende, eso constituía estar dentro de los plazos procesales para temas de investigación. Siendo declarado complejo, se realizaron todas las investigaciones respectivas, tanto [así como] los requerimientos ante el órgano jurisdiccional competente”.