(Foto: El Comercio)
Diego Chirinos

Los primeros días de en el MTC fueron agitados, aunque él dice que los ha “enfrentado con entusiasmo”. Con ese mismo entusiasmo, en un inicio, el Gobierno se inclinó por la adenda al contrato del . Sin embargo, luego colisionaría con lo que el ministro califica de “una voluntad política desfavorable”.

Hace casi un año, cuando lo convocaron para el primer Gabinete de Ministros, ¿cuál era su postura sobre el aeropuerto de Chinchero?
No tenía una opinión informada porque no había leído el contrato de arriba a abajo, como debe leerse para poder opinar. El Gobierno heredó un mal contrato, con vacíos y problemas financieros, e intentó corregirlo.

— Si ya existía la opción del mutuo disenso, ¿por qué optar por la adenda?
Porque este Gobierno entró para sacar adelante las cosas. Buscar una solución era una alternativa viable.

— Si era viable, ¿por qué no continuar con ella?
La adenda no tuvo consenso y generó demasiado ruido. Seguir adelante podría haber sido una victoria pírrica. Tras estudiar todos los escenarios, determinamos que la ruta del mutuo disenso era la mejor para el país.

— Cuando afirma que se “generó demasiado ruido”, ¿se refiere al ruido político?
Al político y al mediático. Hubo excesiva carga negativa y no bien informada. Hay gente que se ha comprado una lucha anti-Chinchero increíble y actores políticos con posturas sin sustento.

— ¿El Gobierno asume algún error en esta situación?
El error era seguir pateando la pelota, como el gobierno anterior. Con la adenda tratamos de darle vida al proyecto en el menor plazo y sin gastar una millonada en juicios que comprometan al Estado. Esa dosis de entusiasmo colisionó con una voluntad política desfavorable.

— Algunos afirmaron que la negociación de la adenda fue corrupta. ¿Puede garantizar lo contrario?
Absolutamente. Soy testigo de cómo se manejó esto. El Consejo de Ministros discutió mucho el tema. Lamentablemente en este país uno puede acusar de corrupto a cualquiera y no pasa nada.

— ¿Hay malestar en el Gabinete con su predecesor, Martín Vizcarra, por haber reculado con la adenda?
No. Martín es una ficha importantísima en el Gobierno. Es el vicepresidente y ha sido un excelente ministro.

— Habla del mutuo disenso. Si la adenda era favorable para Kuntur Wasi, ¿por qué disentirían con ella?
Los negocios tienen costos y no solo monetarios. Llega un momento en el cual no tiene sentido seguir luchando por algo que, de pronto, empieza a dañarte. Nadie quiere estar involucrado en un tema que es editorial o titular de los periódicos todos los días.

— ¿Pagarán una compensación al concesionario?
No lo sabemos. Para eso hay una comisión de salida. Vamos a sentarnos a ver cuáles son las partidas de las cuales ellos esperan un retorno. Un bloque de partidas será incuestionable y otro será espacio de negociación. Si nosotros dijéramos “no” a todas las pretensiones [de Kuntur Wasi], el desenlace no podría ser de mutuo disenso.

— ¿La negociación debe cerrarse, como máximo, dentro de los tres meses de prórroga de la suspensión de la adenda?
Quiero pensar que se resolverá antes de los tres meses. Ojalá se diera en un mes.

— ¿Quiénes formarán la comisión?
Habrá un presidente independiente [ajeno al concesionario y al Gobierno] que facilitará la negociación. También habrá gente del Gobierno, de Kuntur Wasi y uno o dos veedores para dar absoluta transparencia.

— Kuntur Wasi no está impedido de participar en próximas obras del aeropuerto. ¿Contemplan incluir alguna restricción?
De ninguna manera. ¿Solo por la presunción de algunos? Si tienen pruebas de que hubo corrupción, que las muestren para inhabilitar a las empresas. Estoy absolutamente comprometido contra la corrupción, pero debemos ser objetivos.

— ¿Al MTC se le impuso una presión innecesaria al designarlo como el destrabador de proyectos?
Si entra un nuevo gobierno y tienes esa cantidad de miles de millones de soles aguantados por cosas como las de Chinchero, lo mínimo que se propone es destrabarlos.

— Pero puede resultar contraproducente si el destrabe, como ha sucedido, demora más de lo esperado.
Ya, ¿y quién tiene la culpa de eso? ¿Cuál es el origen?

— Se lo pregunto yo: ¿de quién es la culpa?
De quien firmó. Nosotros somos herederos de una pésima gestión. Es la verdad con todas sus letras. Cargamos baldes de arena en cada sector. Es la segunda cartera que veo y las cosas se repiten.

— La línea 2 del metro representa casi diez veces la inversión del aeropuerto de Chinchero, pero aún no se destraba. ¿La firma de una adenda es inminente?
No quiero utilizar la palabra destrabe, pero estamos en pleno proceso de solución en muchos frentes. No solo hay un problema de [entrega de] terrenos [expropiados]. Hay expedientes técnicos demorados y temas no resueltos. Es otra situación heredada, pero primero déjame pasar la página de Chinchero [ríe].

— ¿Las tuneladoras que llegaron al Perú en marzo del 2016 siguen sin utilizarse?
Todavía no se utilizan.

— El ex ministro Vizcarra dijo que la ampliación del aeropuerto Jorge Chávez se iniciaría en el segundo semestre. ¿Lo ratifica?
Esta semana vamos a tener novedades. Es todo lo que puedo decir [ríe].

— Tantos proyectos lo obligan a trabajar de cerca con la contraloría. ¿Edgar Alarcón debe seguir en el cargo?
La contraloría es una institución que, por su naturaleza, no debería soportar ningún cuestionamiento.

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