José Guillermo Paredes -hermano del exministro de Transportes, Carlos Paredes- llegaba a Palacio de Gobierno en auto alquilado, no registraba sus visitas y esperaba –sin dejar huella- que el entonces presidente Ollanta Humala lo atendiera. En mayo del 2019, el Poder Judicial dictó una orden de prisión preventiva por 18 meses en su contra, en el marco de la investigación fiscal contra el llamado ‘club de la construcción’.
El fin de semana, la Unidad de Investigación de El Comercio publicó -en exclusiva- el testimonio de un colaborador eficaz ante la fiscalía que revelaría cómo, previa coordinación, Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia habrían recibido sobornos cambio del otorgamiento de licitaciones a un grupo de empresas durante su gobierno.
“En una reunión llevada a cabo en Palacio de Gobierno, José Paredes le comunicó a Ollanta Humala Tasso lo conversado con [Carlos] García Alcázar [exfuncionario del MTC y operador del ‘club de la construcción’]” sobre el 3% de soborno de cada obra ganada que estaban dispuestas a entregar las empresas del ‘club’ para repartirse los proyectos. “Carlos García comentaba que los porcentajes para las partes involucradas como beneficio sería del 3% que se distribuirían entre los involucrados, de los cuales hasta 2% correspondería a Ollanta Humala, el saldo sería una comisión para José Paredes con su hermano Carlos Paredes”, se lee en el documento fiscal al que tuvo acceso este Diario.
La tarde del sábado, mediante su cuenta de Twitter, expresidente Humala rechazó “cualquier acto de corrupción" del llamado ‘club de la construcción’ y calificó de ‘falsa’ la información brindada por el colaborador eficaz.
—José Paredes: una pieza clave—
‘Pepe’ Paredes era amigo y compañero de promoción del Ejército de Humala Tasso. Es, además, como lo mencionamos, hermano de Carlos Paredes, exministro de Transportes y Comunicaciones en el gobierno humalista. En enero del 2019, El Comercio reveló las declaraciones de dos colaboradores eficaces de la fiscalía en la investigación del ‘club de la construcción’. Según estos, como titular del MTC, Paredes habría permitido que el ‘club’ operara impunemente en el gobierno de Humala a cambio de sobornos.
El ‘club de la construcción’ era una “cartelización empresarial” de al menos 18 constructoras que, según la fiscalía, en lugar de competir entre sí, se coludían para repartirse los proyectos que Provías Nacional, unidad ejecutora del MTC.
De acuerdo con los colaboradores eficaces, el intermediario para llegar al entonces ministro Paredes era su hermano José. Según los testimonios, este recibió sobornos por US$17 millones del ‘club’ en el tiempo en que su hermano era ministro.
“[El entonces ministro Carlos Paredes] coadyuvó a las actividades de la organización delictiva el ‘club de la construcción’, a cambio de sumas de dinero considerables, que eran entregadas a su hermano José Guillermo Paredes Rodríguez”, dijo uno de los colaboradores de la fiscalía en ese entonces.
Tras conocerse los testimonios de los colaboradores eficaces, Ollanta Humala –a través de Twitter- rechazó “que se desmerezca la gestión de Gobierno” que ejercieron “con responsabilidad y transparencia”.
Menos de dos semanas más tarde, “Panorama” difundió el testimonio del empresario Eduardo Sobenes, quien aseguró que, en el 2011, Humala aportó US$200 mil de capital a la empresa empresa Peruana de Vigilancia y Protección S.A., de la cual Sobenes era accionista junto a José Paredes.
A través de un comunicado, el partido Nacionalista negó categóricamente que dicho aporte haya existido.
—Los detalles—
Según los testimonios de los colaboradores eficaces a los que este Diario tuvo acceso, José Paredes y Ollanta Humala se reunieron en Palacio de Gobierno en el 2011. En este encuentro, Paredes le comunicó al entonces jefe de Estado que las empresas del ‘club’ estaban dispuestas a pagar el 3% de cada obra ganada como soborno a cambio de poder repartirse los proyectos. De este porcentaje, 2% correspondería a Humala Tasso y el saldo sería una comisión para los hermanos Paredes.
El expresidente, sin embargo, le dijo que primero debía consultarlo con su esposa. “Siempre hacía participar a Nadine Heredia manifestando que ella era su mejor primer ministro, por lo que debía tener su opinión”, dijo el colaborador N° 04-2019 a la fiscalía.
El 7 de octubre del 2011, Humala le comunicó a José Paredes que Heredia había aceptado la propuesta, siempre y cuando ella revisara “el avance de la adjudicación de las obras para tener control”.
Un mes y medio después, el 21 de noviembre de ese año, se habría realizado el primero de muchos pagos que se hicieron a Ollanta Humala, por US$500 mil en Palacio de Gobierno.
“Todas las entregas de dinero a Ollanta Humala se hicieron en la noche en su oficina de Palacio previa coordinación por teléfono con su persona, con su secretaria Cynthya Montes” o con los encargados de su seguridad “Jaime Herrera, Percy Reyes o Hermógenes Pérez. El dinero era ingresado en un maletín que contenía sobres manila y bolsas con fajos de US$10 mil”, afirmó el colaborador N° 09-2019.