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Por Martín Calderón y Martín Hidalgo
El presidente de la Comisión Permanente, Pedro Olaechea, terminó la jornada de ayer anunciando que se mantendrán en funciones, exhortando a las Fuerzas Armadas a no respaldar al presidente Martín Vizcarra e invocando a la comunidad internacional a seguir de cerca el desarrollo de la crisis política en el país. Todo esto luego de que se aprobara presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) para declarar nula la disolución del Congreso.
Olaechea, como ya es su costumbre, leyó un comunicado luego de la sesión de la Comisión Permanente, donde se declararon en sesión continua y, en más de tres horas de debate, adoptaron una serie de acuerdos con votos de Fuerza Popular y siete grupos aliados.
La sesión de esa instancia legislativa –la cual funciona luego de la disolución del Congreso, de acuerdo con la Constitución– se inició con una discusión de hora y media sobre si tenían facultades para tocar los temas de la agenda: la presentación de una demanda competencial y una medida cautelar ante el TC para declarar nula la disolución, y la carta de renuncia a la vicepresidencia de Mercedes Araoz, quien el lunes juró ante el pleno como presidenta encargada.
El entrampamiento terminó con los miembros de Nuevo Perú, Frente Amplio, Bancada Liberal y Peruanos por el Kambio retirándose del hemiciclo. Desde un inicio, izquierdistas y oficialistas se toparon con una sesión hostil. “¿Por qué han venido los golpistas?”, cuestionó Rosa Bartra. La discusión devino en un debate semántico sobre si debían autodenominarse “congresistas” o “excongresistas”.
Superado el entrampamiento y sin miembros opositores en el hemiciclo, el bloque mayoritario pasó a votar el punto más importante de la agenda: la demanda competencial y la medida cautelar ante el TC. El debate, pese a ser el punto medular, duró 14 minutos y solo contó con la intervención de Miguel Torres (Fuerza Popular). Se aprobó con 21 votos de ocho grupos.
El segundo punto de la agenda fue la carta de renuncia de Araoz, de la cual solo se dio cuenta. Olaechea explicó que no podían aprobarla debido a que la juramentación de Araoz fue ante el pleno.
Posteriormente, el mismo Olaechea indicó que era muy difícil que se lleve a cabo la sesión plenaria que fue convocada para mañana, debido a las dificultades para el ingreso y la custodia oficial en los alrededores.
En el debate, se habló de otros puntos. Al referirse a la votación del candidato a magistrado del TC Gonzalo Ortiz de Zevallos, Olaechea dijo: “Hubo cámaras específicamente apuntadas a todas las áreas del Congreso, porque sabíamos que esa votación, como después probó ser, fue el detonante de la disolución del Congreso”.
El debate de la Permanente debió culminar con la situación de Araoz, pero Olaechea amplió la agenda a dos acuerdos más: 1) autorizar al procurador del Congreso a iniciar legales “en defensa de la institución” y solicitar al Ministerio del Interior el retiro de policías de las instancias legislativas; y 2) devolver al Ministerio de Relaciones Exteriores el oficio en el que se solicitaba que 34 miembros del Congreso disuelto entreguen sus pasaportes diplomáticos.
La decisión de fondo de seguir en funciones se veía venir desde temprano, cuando Olaechea solicitó la renuncia de Vizcarra. “Le propongo al presidente Vizcarra, salgamos por la Constitución: renuncie usted, renunciamos todos y llamamos a elecciones inmediatamente”, dijo en su primera conferencia de prensa del día.
Hasta el martes, Olaechea se mantenía firme en la decisión del lunes de suspender a Vizcarra por un año, pero su discurso cambió tras la renuncia de Araoz.
