Ayer, fueron encontrados 13 perros que habían sido encerrados por su dueño en un departamento en La Victoria por más de tres meses en condiciones deplorables. Tres de ellos estaban agonizantes debido a la desnutrición y dos sin vida. Hace pocas semanas, aparecía en diversos medios un video en el cual un joven, machete en mano, amenazaba a un indefenso cachorro de mirada perdida en la selva de Cusco. Segundos después, lo decapitaba sin remordimiento alguno, lo que causó el espanto de quienes estaban a su alrededor.
Es recurrente apreciar –con algunas excepciones– las pésimas condiciones y la crueldad a la que son sometidos muchos animales destinados al consumo humano durante el transporte y su alojamiento antes de ser sacrificados. Estos hechos parecen multiplicarse y el común denominador en todos los casos es que los protagonistas no son sancionados.
EL PROBLEMA
Diversos especialistas coinciden en que el origen de esta realidad se encuentra en que la ley vigente sobre protección a los animales domésticos y silvestres es sumamente deficiente debido a que contiene graves errores técnicos. Los problemas con la norma se acentúan dado que, a pesar de haber sido promulgada hace más de 15 años, no ha sido reglamentada y, por consiguiente, gran parte de la regulación no puede ser aplicada.
Las sanciones que prevé la actual ley para las personas que maltraten o den muerte a un animal son consideradas faltas (las faltas son sanciones menores que no suponen la privación de la libertad de los responsables) y no corresponden a un delito, por lo que –agregan los expertos– no habría adecuados mecanismos disuasorios para detener esta clase de conductas. Si hoy alguien mata con crueldad a un animal doméstico, por ejemplo, la máxima sanción que podrá recibir es una multa que, en la gran mayoría de casos, es ínfima.
Ante esta problemática, se han presentado múltiples proyectos de ley. Una de las propuestas que ha generado mayores consensos en el Legislativo es la modificación del Código Penal para incorporar la pena de cárcel para quienes maltraten o maten con crueldad a un animal. No obstante, para gran parte de las asociaciones protectoras de animales consultadas por El Comercio, si bien esta medida es positiva, constituye solo una pequeña parte de la reforma que se necesita para acabar con el maltrato animal en el Perú.
LAS PROPUESTAS
Para el congresista Carlos Bruce, autor de uno de los proyectos de ley que pretende penalizar el maltrato animal, deben adoptarse pasos de manera paulatina para lograr pequeños avances que permitan ir sumando mayores iniciativas en el tiempo. “Mi proyecto se limita a convertir en un delito lo que actualmente es una falta”, afirma.
Este texto, que ya tiene el visto favorable de la Comisión de Justicia, se votaría junto con el resto de normas que modificarían el Código Penal el jueves próximo en el pleno del Congreso. El texto contempla penas hasta de cuatro años de cárcel para quien mate a un animal.
No obstante, el proyecto es criticado por diversas asociaciones protectoras que señalan que tan solo cubre a animales domésticos de compañía y deja de lado al resto de animales domésticos y silvestres.
Lee el informe completo en la edición impresa de El Comercio.
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Dueña de #perros abandonados en #LaVictoria culpó a sus vecinos [#VIDEO] http://t.co/J688OQSddw pic.twitter.com/uYPHwroCOU
— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) abril 17, 2015