El congresista Pasión Dávila, de la bancada Bloque Magisterial, calificó la agresión que cometió contra otro legislador, Juan Burgos, y por la cual fue suspendido por 120 días como una “acción positiva” porque ayudó a reflexionar a todos sus colegas.
En declaraciones a RPP, el parlamentario minimizó el golpe que propinó por la espalda a Burgos el año pasado como una “casualidad” y un “acto simbólico” en lugar de una agresión por la cual fue suspendido por 120 días.
“Eso fue una casualidad. Hasta ahí incluso yo veía que se insultaban frente a frente. Desde esa fecha, ni siquiera nadie se insulta. Esa acción fue positiva”, dijo en alusión al incidente.
“Fue ese incidente que nos ha hecho reflexionar a todos para que podamos mantener nuestra postura y respeto [...] Ahorita ya nadie se agrede”, insistió cuando se le repreguntó sobre la gravedad de los hechos.
Para Pasión Dávila, fue necesario que protagonizara esa agresión en medio del hemiciclo para que haya un “sobresalto” que permita a todos enmendar su accionar. “Si uno no comete errores, a veces no nos corregimos”.
El parlamentario fue más allá y rechazó que el golpe haya sido una agresión. “Fue un error. No fue para agredirnos [...] no fue para agredirlo. Es un acto simbólico”, replicó.
El legislador del Bloque Magisterial recibió la máxima sanción que recomienda la Comisión de Ética y fue suspendido 120 días por golpear, el 11 de diciembre del 2022, en medio del hemiciclo a Juan Burgos.
Según informó El Comercio, Pasión Dávila es la opción de su bancada para asumir la presidencia de la Comisión de Trabajo para el periodo 2023-2024.