La emergencia por el brote del coronavirus (COVID-19) y la denominada “nueva convivencia social” que implica el hacer frente a la pandemia fue el tema central de una reunión virtual que sostuvieron el último martes el primer ministro Vicente Zeballos, titulares de distintas carteras del Ejecutivo y representantes de seis de los nueve partidos políticos que tienen representación en el Congreso de la República.
Se trató de una cita a iniciativa del Gobierno para recoger propuestas y encontrar coincidencias para hacer frente a la enfermedad y sus consecuencias. Un diálogo que se produce a casi tres meses de iniciado el estado de emergencia nacional y que significó un reencuentro de Zeballos específicamente con representantes de organizaciones políticas, luego de la ronda de conversaciones sostenida en febrero tras las elecciones generales y antes del inicio de las funciones del nuevo Parlamento.
Por esa distancia temporal y todo lo que ha ocurrido en medio, analistas consultados por El Comercio consideran que el Gobierno debió tener diálogos con los partidos con anterioridad. Coinciden, sin embargo, que más vale tarde que nunca.
Para el analista político Enrique Castillo, aunque los partidos políticos están muy menguados, en algunos casos hay fuerzas movilizadoras. Puso como ejemplo a Alianza para el Progreso en el norte del país, así como al Frente Amplio en determinadas regiones.
Por tanto, sostiene que es mejor que los diálogos sea con representantes oficiales de los partidos que con las bancadas del Congreso, porque estas no necesariamente representan la posición de la agrupación política o, en algunos casos, están conformadas principalmente por invitados.
“Las bancadas tienen un trabajo, ahora cuestionado o lo que sea, pero un trabajo en el Congreso. En cambio los partidos se van a abocar a una campaña preelectoral, en la que no van a participar muchos de los congresistas. Si se mira el presente, mediano y largo plazo sí es importante estas reuniones con los partidos”, indica Castillo.
A juicio de Jeffrey Radzinsky, director del Grupo Fides Perú, el diálogo también se debió de haber dado con los partidos en torno a los decretos legislativos de las facultades delegadas, considerando que el Gobierno no tiene bancada. “Eso ha faltado y ha podido ser útil. Podría reducir un poco esta hemorragia legislativa de tan poco nivel por un lado y, por otro, bajar el nivel de conflictividad”, explica.
Y aunque apunta que hay liderazgos debilitados en las organizaciones políticas, califica de positivo que se dialogue en un escenario crítico que requiere una agenda y un objetivo concreto a fin de obtener frutos. “Para que una reunión política logre algo concreto, debe tener dos cosas fundamentales. Lo primero es agenda, cuál es el objetivo fundamental. Y lo segundo es una rendición de cuentas de esa agenda. Porque si no, es solo como un gesto de buena voluntad e intenciones y eso sirve muy poco. Y en épocas críticas sirven menos”, precisa.
El periodista Pedro Tenorio también ha considerado que el Gobierno debió convocar a los partidos políticos representados en el Parlamento al inicio del estado de emergencia. Sin embargo, destacó que “se esté recuperando el tiempo perdido” con el objetivo de llegar a acuerdos. “La política no tiene que ser una pugna permanente. Entendemos que en una campaña hay competencia. Sin embargo, un país no puede mantener el clima de confrontación, lo vimos entre el 2016 y 2019, no nos llevó a nada. Tenemos que cambiar el chip”, acotó.
En la cita participaron los presidentes de Acción Popular, Partido Morado, Frente Amplio, Somos Perú y Podemos, respectivamente Mesías Guevara, Julio Guzmán —quien así reapareció en una actividad política de ese alcance—, Marco Arana, Patricia Li y José Luna Gálvez. Asimismo, Luis Galarreta, secretario general de Fuerza Popular, quien acudió en representación de la presidenta de partido, Keiko Fujimori.
Y además de Zeballos, estuvieron los ministros de Economía y Finanzas, María Antonieta Alva; Salud, Víctor Zamora; Trabajo y Promoción del Empleo, Sylvia Cáceres; y Desarrollo e Inclusión Social, Ariela Luna.
Participación de otros sectores
Pero dicha reunión fue una de las seis que el Ejecutivo mantuvo en dos días con distintos sectores. Por ejemplo, organizaciones evangélicas, ONG, gremios sindicales y gremios empresariales. En la cita del martes con la Sociedad Nacional de Industrias participó el presidente Martín Vizcarra.
Castillo resalta que dichas reuniones deben ser frecuentes para realizar coordinaciones en base a una agenda, así como para que el Ejecutivo escuché tanto elogios, como críticas. Sin embargo, considera importante que el presidente Vizcarra sea parte de todos los diálogos porque “no es lo mismo que le transmitan lo que se discutió o que él escuche y participe”.
Radzinsky recuerda que los distintos ministerios ya han ido sosteniendo diálogos con diversos sectores en medio de la emergencia, aunque consideró importante que estén los líderes de distintas organizaciones a fin de que se tomen medidas concretas. “Me parece positivo si es que están las cabezas, los que pueden tomar decisiones, y hay una agenda concreta. Porque esta crisis va a trascender el período de emergencia y va a trascender el periodo de cuarentena. Y se van a necesitar una serie de acciones sostenidas por varios meses. Y va a ser muy difícil sostenerlas durante la campaña electoral, donde la demagogia y el populismo aumentan”, advierte.
Tenorio valoró que se abra un foco de diálogo. “Este ha sido un paso positivo, ojalá se realice todos los meses o cuando sea necesario. La reactivación económica es un tema imperativo, tiene que llegar a la mayor cantidad de peruanos”, señaló.
¿Y el foro del Acuerdo Nacional? La última sesión en la que participaron Vizcarra y distintos miembros de la entidad fue el 5 de mayo. No había reunión desde diciembre, cuando se presentó el estudio “El reto de la igualdad. Una lectura de las dinámicas territoriales en el Perú”, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El analista político Enrique Castillo afirma que las reuniones sectoriales son más ricas, pues “un ambiente como el Acuerdo Nacional termina siendo más protocolar y con menos posibilidades de un intercambio de opiniones. Acá son reuniones más directas”.
Finalmente, Jeffrey Radzinsky, también director del Programa de Comunicación Política de la Universidad del Pacífico, cree que el foro del Acuerdo Nacional ha perdido el peso que tuvo hace un tiempo o que, por lo menos, se ha ido diluyendo la cohesión de la anterior reunión.
¿Qué se espera en adelante? Por lo pronto, la Presidencia del Consejo de Ministros informó que el primer ministro Vicente Zeballos propuso durante la reunión virtual con los partidos institucionalizar dicho diálogo a fin de articular planteamientos que beneficien a la población. “Es una forma madura y responsable de asumir tareas mayores por nuestro país”, precisó. Solo el tiempo dirá si ello se concretó y, sobre todo, si hubo resultados concretos.