Glave critica suspensión del estatuto para contratar en el Congreso

La congresista Marisa Glave (Nuevo Perú) cuestionó esta mañana la suspensión del estatuto de contrataciones en el Congreso. 

La parlamentaria consideró que con esta medida la Mesa Directiva del Congreso “podrá hacer lo que les dé la gana con los procesos de contratación”.

Como se recuerda, el Legislativo suspendió temporalmente la vigencia del Estatuto del Servicio Parlamentario. Con esta disposición ha podido contratar personal por tiempo indefinido sin requerir que los empleados tengan cinco años trabajando de manera ininterrumpida.

Lamentó, en esa línea, que ni el oficial mayor del Congreso, José Cevasco, esté informado respecto a las contrataciones por tiempo indefinido que ha venido realizando el Parlamento.

Asimismo, Glave recordó que esta medida se aprobó sin debate previo en el Pleno del Parlamento.

“Dijeron que era un tema que venía de acuerdo de Junta de Portavoces, que solamente era para agilizar procesos administrativos por parte de la Mesa Directiva y que esto tenía que pasar rápidamente”, señaló en Canal N. 

“Más haya que tengan acuerdos en la Junta de Portavoces, sea un tema que se pueda debatir en el Pleno, porque para algo tienes 130 congresistas y no 5 que son los que se sientan en Portavoces”, añadió.

Glave también dio a conocer que el vocero de su bancada, Alberto Quintanilla, ha exigido a la Oficialía Mayor que le brinde información sobre las contrataciones que ha realizado el Legislativo a raíz de denuncias sobre contrataciones irregulares recibidas por trabajadores del Congreso.

Sin embargo, hasta la fecha, no ha recibido respuesta; puesto que, el requerimiento “había pasado a consulta a la Mesa Directiva para ver si nos podían dar la información”.

En esa línea, la legisladora mostró su extrañeza porque un pedido de información como el que realizó Quintanilla se deriva al oficial mayor “sin ningún trámite de por medio”.

Finalmente, Glave pidió regularizar rápidamente esta situación porque actualmente se tiene en el Congreso un “aparato [estatal] inmenso y sin controles ni filtros” para contratar personal.