El ex presidente del Instituto Peruano del Deporte (IPD) Francisco Boza sostuvo que no ve delito ni falta ética por haber aceptado la ayuda del hoy prófugo Martín Belaunde Lossio para modificar la partida presupuestal que le tocaba en el 2013, a fin de tener los recursos para tres proyectos, entre ellos del polideportivo Elías Aguirre de Chiclayo.
En entrevista con El Comercio, Boza negó que haya participado en una acción de lobby a favor de la empresa Antalsis, que tiene vínculos con Belaunde Lossio, según los correos electrónicos revelados el último domingo en “Cuarto Poder”.
“La palabra lobby tiene otra definición, esto salió en una reunión de amigos […] Yo no considero [haber aceptado su ayuda] como una falta ética, no es un delito haber enviado una ayuda memoria y ver qué podía hacer. No veo el delito, no veo la falta cometida, puede haber sido un error, hoy sé que fue un error”, manifestó.
Detalló que en noviembre del 2012, cuando aún no se sabía de los nexos de Belaunde Lossio con la presunta red de corrupción de César Álvarez en Áncash, él se lo encuentra en una reunión social en el Club Regatas. “Él me pregunta cómo iba [mi trabajo en el IPD], yo le respondí que estaba tramitando un decreto y me pidió que le envíe un ayuda memoria para ver cómo podía ayudarme. Eso fue lo único que me comentó”, refirió.
“A quién contactó, no me consta, no me consta que tiene amistades. Lo que sucede hoy [que está prófugo] no sucedía hace dos años. Es un hecho, un acto entre amigos”, añadió.
Boza afirmó que no solamente aceptó la ayuda de Belaunde, sino que le pidió a un grupo de congresistas, cuyos nombres evitó revelar, apoyo para modificar la Ley de Presupuesto del 2013. Asimismo, indicó que siguió los caminos regulares a través del Ministerio de Educación y del Ministerio de Economía y Finanzas, que finalmente aprueba trasladar una partida de 88 millones de soles no gastados en el 2012 al 2013, para las obras en Chiclayo.
LA INFORMACIÓN ERA PÚBLICA
El ex jefe del IPD también indicó que los detalles de los proyectos de su institución, como el del polideportivo Elías Aguirre, eran de conocimiento público, por lo que descartó que haya beneficiado a Belaunde Lossio con información privilegiada.
Tras la aprobación de la partida presupuestal del IPD, el Consorcio Chiclayo, formado por el Grupo Ortiz y Antalsis, vinculado a Belaunde Lossio, se hicieron con la buena pro. Solamente, concluyen dos partes del estudio técnico, más no la obra, por lo que se le rescindió el contrato. Actualmente, la construcción del centro deportivo está en una nueva licitación.
“NADIE ME PIDIÓ RENUNCIAR”
Boza dijo que la decisión de renunciar a la presidencia del Instituto Nacional de Deporte fue de él y no de terceros.
En esa línea, negó que haya recibido una llamada de Palacio de Gobierno o del Ministerio de Educación, para que dé un paso al costado. “Que sigan las investigaciones que correspondan, yo el lunes iré a la Comisión de Fiscalización del Congreso”, agregó.
También le respondió al congresista Daniel Abugattás (Gana Perú), quien dijo que Boza desvió fondos públicos del IPD al Comité Olímpico Peruano (COP): “El Comité Olímpico forma parte del sistema deportivo nacional y en nuestra gestión lo incluimos en la ley de presupuesto […] Hace más de 30 o 40 años, de toda la vida, el IPD le transmitió fondos al COP”, expresó.
“Este tema ya lo he conversado con Abugattás muchas veces, este tema lo investiga la fiscalía y control interno ya hizo sus informes”, complementó.