Tres años y cuatro meses después de haber sido nombrado consejero jurídico del presidente Ollanta Humala, el abogado penalista Eduardo Roy Gates (39) se vio obligado de salir de las sombras para dar la cara por la reunión que sostuvo en mayo último con el ministro de Justicia, Daniel Figallo, y la entonces procuradora anticorrupción adjunta, Yeni Vilcatoma.
A Roy Gates y a Figallo se los acusa de haberse interesado por uno de los procesados en el Caso ‘La Centralita’: Martín Belaunde Lossio, prófugo empresario que en la campaña presidencial del 2006 fue asesor de prensa de Humala.
Ayer, el consejero presidencial volvió a negar haber ejercido presión sobre la ex procuradora Vilcatoma e incluso, se animó a precisar cuál era el rol que cumplía en Palacio de Gobierno, que había sido todo un misterio hasta hace unos días.
La relación entre Roy Gates y Humala comienza en el 2006, el mismo año en que el nacionalista pierde la segunda vuelta electoral contra Alan García (Partido Aprista). Durante esa campaña, el teniente coronel del Ejército en retiro fue acusado de haber cometido delitos de lesa humanidad en la región San Martín, cuando estuvo destacado en la base de Madre Mía.
“Sí, fui abogado del presidente Ollanta Humala desde el 2006, por el Caso Madre Mía, que fue el único que se judicializó y lo representé en otras 12 acusaciones a nivel de la fiscalía”, contó en el programa “No culpes a la noche”.
Aunque Roy Gates ha negado que su nombramiento como consejero sea un premio por lograr que en el 2009 se archivara la denuncia contra Humala, lo cierto es que esa decisión judicial terminó beneficiando al líder nacionalista, cuya imagen para las elecciones del 2011 fue renovada por el brasileño Luis Favre.
“No (fue un premio), yo diría que (mi nombramiento) fue por un tema de confianza. El único consejero jurídico del presidente soy yo”, refirió.
Además, según una investigación de El Comercio, Roy Gates estuvo detrás de la estrategia legal que libró al suboficial EP Amílcar Gómez Amasifuén -quien participó con Humala en el levantamiento de Locumba- por el presunto soborno de los testigos en el Caso Madre Mía.
El suboficial EP Amílcar Gómez Amasifuén forma parte de un grupo encargado de realizar acciones cívicas e institucionales en coordinación con el despacho presidencial, según informó el Ejército Peruano.
¿CUÁL ES SU FUNCIÓN?
En el programa “Agenda Política”, donde dio su primera entrevista como asesor, Roy Gates indicó que su labor es absolver cualquier consulta que tenga el presidente Ollanta Humala u otro integrante del Despacho Presidencial respecto a una norma en específico.
Explicó que su cargo no es incompatible con el del ministro Figallo, que como titular de Justicia. viene a ser constitucionalmente el asesor legal del Gobierno.
“El ministro de Justicia es el asesor legal del Gobierno, es el asesor legal del presidente también, pero no existe ninguna clase de incompatibilidad entre la figura del ministro y la de un asesor jurídico. Así como un ministro de Defensa o Interior no impide que el mandatario tenga asesores en esas áreas [en referencia a Wilfredo Pedraza]”, dijo.
“Imagínese que el presidente [Ollanta Humala] tenga alguna consulta sobre un aspecto puntual de determinada norma. No va a llamar al ministro de Justicia para le absuelva solamente esa consulta, hay cuestiones que son detalles y que es necesario darle una solución de inmediato”, añadió.
Roy Gates ha dicho que también conoce a Martín Belaunde Lossio, porque se lo encontraba en el local del Partido Nacionalista, cuando iba a coordinar con Humala su defensa. Aunque, aclaró que no es su amigo.
SUS POLÉMICOS DEFENDIDOS
Casi en paralelo a la defensa de Humala, Roy Gates también representó al ex ministro de Pesquería del primer gobierno aprista Rómulo León Alegría, acusado por presunto tráfico de influencias, luego de que se revelaron los ‘Petroaudios’. En esa grabación, se le escucha a León Alegría celebrar junto al ex director de Perú Petro Alberto Químper la buena pro que obtuvo la empresa noruega Discover Petroleum para explotar lotes petroleros en el norte del país.
Precisamente, Roy Gates acusó al Gobierno aprista de injerencia política en la investigación contra su patrocinado, que en julio del 2009 logró su arresto domiciliario.
Tres años después, en julio del 2012 y con el abogado en Palacio, la orden de prisión domiciliaria sobre León Alegría fue levantada, porque el tiempo de carcelería había excedido.
Entre el 2009 y 2010, Roy Gates también defendió a Segundo Manuel Sánchez Paredes y a sus hijos, Simón y Miguel Sánchez Alayo, todos procesados por el presunto delito de lavado de activos.
En el 2011, fuentes de la Policía Nacional, confirmaron que el ahora asesor de Humala todavía defendía al empresario César Cataño y a las compañías Kanagawa, Vizcar y Peruvian Airlines, enjuiciadas por blanqueo de capitales.
Anoche, Roy Gates evitó responder por estos clientes: “Si gusta en otra oportunidad hablamos de esos caso, yo he venido como consejero presidencial”.
NEGÓ PODER PARALELO
En “No culpes a la noche”, Eduardo Roy Gates también negó que él constituya un poder paralelo en Palacio de Gobierno.
“Quiero limpiar la figura del consejero jurídico, porque se dice mucho en el sentido de que se ha creado un poder paralelo, es una de las expresiones que he escuchado. Incluso, han dicho que el presidente Humala ha creado esta figura, cuando en otros gobiernos hubo consejeros”, refirió.
Por ejemplo, mencionó que en el gobierno de Alejandro Toledo, este nombró al ex ministro Juan Sheput como su consejero en asuntos políticos en el 2004; mientras en el segundo quinquenio de Alan García se nombraron como asesores a Juan José Salazar García, para el Seguimiento y Supervisión de Obras Públicas, y al ex ministra Susana Pinilla, en materia de Inversión Pública.
“Aquí está la resolución que me nombra”, dijo, para negar que sea un asesor en las sombras, aunque, según contó el propio abogado no le pidió permiso al presidente Humala para reunirse con la ex procuradora Vilcatoma.