Luciana León: el ocaso de una joven política

En poco más de una década, Luciana León (Lima, 1978) pasó de ser una de las congresistas más jóvenes electas para un periodo legislativo, a ser hoy sindicada por la fiscalía como el brazo político-legal de la organización criminal ‘Los Intocables Ediles’.

León Romero -sobre quien pesa ahora una orden judicial de impedimento de salida del país por 36 meses- obtuvo por primera vez una curul en el Congreso en el 2006, gracias a 65.339 votos que obtuvo de respaldo. Al ser la legisladora de menor edad, conformó junto con Carlos Torres Caro y Martha Hildebrandt, la Junta Preparatoria del Parlamento, que tomó juramento a los nuevos congresistas.

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El martes 11 de febrero se conoció que Luciana León dejará de ser militante del Partido Aprista Peruano (PAP). A través de un escrito dirigido al secretario general de la agrupación, Elías Rodríguez, anunció su decisión de que se inicie su proceso de desafiliación.

En el partido de la estrella, Luciana León ya había sido parte de la Juventud Aprista Peruana. Incluso sus estudios de derecho en la Universidad de Lima, que cursó entre 1996 y el 2001, los llevó a la par de su cargo como secretaria distrital de juventudes.

Su padre, Rómulo León, influyente, pero cuestionado exministro de Alan García y exdiputado -y que luego se vería involucrado en el escándalo de los Petroaudios-, sin lugar a dudas fue importante en su formación política, al igual que la figura del fallecido exjefe del Estado.

Cuando fue electa por primera vez, los corrillos del Congreso ya no le eran ajenos, como sí a algunos de sus colegas.

Al año siguiente de terminar la universidad, había sido contratada como asesora legal en la Comisión de la Mujer del Parlamento, para luego ser asesora de la segunda vicepresidencia de la Mesa Directiva. Luego también trabajaría en el Ministerio Transportes y Comunicaciones.

Ya como congresista, participó en la Comisión de Educación y la de Comercio exterior. También presidió la subcomisión de Juventud y Deporte, sector que había anhelado dirigir desde la campaña.

En ese periodo legislativo 2006-2011, figura entre los autores y coautores de 160 proyectos de ley, aunque solo 57 se convirtieron en leyes. Principalmente las temáticas que abordó son temas de juventud.

León Romero fue reelecta para el periodo 2011-2016, en donde presidió la Comisión de Comercio Exterior y Turismo dos veces. En el 2014, se conoció un caso de presunto desbalance patrimonial, aunque finalmente este no prosperó ni en la Comisión de Ética ni en la fiscalía. En ambas instancias, el caso fue archivado.

Su siguiente y último periodo como congresista fue en el Parlamento que hace meses se disolvió. Es en esta última administración donde ocupó cargos políticos más resaltantes, incluso llegando a formar parte de la mesa directiva: fue electa -con amplia mayoría- como tercera vicepresidenta.

También presidió comisiones importantes como la de Defensa, la Comisión de Levantamiento de Inmunidad Parlamentaria, así como también fue vocera de la Célula Parlamentaria Aprista.

Sin embargo, a lo largo de los meses, se observaron sus fuertes discrepancias con el resto de su bancada, que estaba conformada solo por cinco integrantes. Quizás la más recordada fue cuando no respaldó la vacancia al expresidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK), junto a Jorge del Castillo.

Y precisamente, una foto que permanece en el tiempo es cuando, también con Del Castillo y otros dirigentes, denunciaron fraude en las elecciones internas del Apra para la nueva directiva, en los exteriores de la Casa del Pueblo. Eran otros tiempos. Era el 2017.

Tras la disolución del Congreso, León formó parte de los pocos legisladores que mantendrían sus prerrogativas como sueldo, asesores y la -poco célebre- inmunidad parlamentaria. Sin embargo, la policía ya estaba siguiendo sus pasos y solo sería cuestión de semanas para que allanen su domicilio y el escándalo empiece.

Ahora, Luciana León es señalada por el Ministerio Público de ser pieza clave de la organización criminal que operó en La Victoria.