(Foto y video: El Comercio)

La disputa en la bancada de Fuerza Popular llegó hasta el penal de la Diroes. Desde su celda, el ex presidente Alberto Fujimori ordenó que se escribieran varios mensajes en su cuenta de Twitter para respaldar a su hijo menor Kenji ante la suspensión por 60 días impuesta por su grupo político.

El disgusto del líder histórico del fujimorismo –según su entorno más cercano– llegó hasta el punto de querer grabar audios para enviarlos a medios de comunicación. Sin embargo, sus abogados le advirtieron sobre posibles sanciones del Instituto Nacional Penitenciario (INPE).

Fujimori hizo caso y solo ordenó escribir los tuits. “Kenji ha actuado honestamente con su conciencia. Creo que los infraternos y desleales son otros”, dice uno de los mensajes.

En la bancada interpretan que la referencia es para los 44 congresistas que votaron a favor de la suspensión de Kenji Fujimori. Solo 7 se abstuvieron, pese a que 23 legisladores enviaron el 11 de julio una carta a la lideresa de la agrupación, Keiko Fujimori, en la que le pidieron dejar sin efecto el proceso disciplinario contra su hermano.

La reacción de Alberto Fujimori fue respaldada por ex congresistas como Luisa María Cuculiza y Alejandro Aguinaga, quienes calificaron como “exagerada” la sanción contra Kenji.

“Hay congresistas nuevos que no entienden y que tienen que saber respetar las opiniones del resto, sin necesidad de decir ‘que se le bote’ o ‘que se le castigue’. Son cosas exageradas que no vienen al caso”, dijo Cuculiza.

Aguinaga recordó que Fuerza Popular ha tenido mano blanda en casos de mayor gravedad. “A Figari del Sodalicio no lo quisieron investigar pese a que existían graves denuncias de abusos a menores, y a Kenji lo sancionan por sus opiniones”, refirió el médico de cabecera de Alberto Fujimori.

—Keiko contesta—
Keiko Fujimori se pronunció ayer en la tarde a raíz del caso de su hermano, también desde su cuenta de Twitter.
Escribió cuatro tuits, uno dirigido a su padre: “Te quiero mucho, te respeto y seguiré luchando por tu libertad, porque sé que eres inocente”.

En otro mensaje, dirigido a su bancada, comentó: “Las normas están para cumplirse. Con unidad, disciplina y lealtad seguiremos haciendo patria”. Y en uno dirigido a su partido, indicó: “Sigamos trabajando con convicción por la institucionalidad de un partido que perdure en el tiempo, más allá de los apellidos”.

—Dos frentes—
Antes de los tuits de la lideresa del fujimorismo, parlamentarios cercanos a ella se pronunciaron sobre el tema.

Héctor Becerril explicó que a Kenji Fujimori se le sancionó por sus “insultos” y no por sus “opiniones”.

Rolando Reátegui pidió al líder histórico de su grupo político que se “tranquilice y tome agua de azahar”.

Federico Pariona, uno de los siete legisladores que se abstuvieron en la votación para sancionar a Kenji, consideró que no existían elementos suficientes para suspenderlo. “Me abstuve porque no se tomó en cuenta la carta que firmamos. Y si nos remitimos a este Congreso, se han visto palabras muy fuertes entre parlamentarios, es parte de la dinámica de la política. Pero al final respeto la decisión de la bancada”, dijo.

Su colega Miguel Elías, quien no estuvo en la votación, también se mostró en contra. “No estoy de acuerdo, debió ser una amonestación, no la suspensión”, se limitó a decir a El Comercio.

Fuentes cercanas a Kenji indicaron que aún analizan acudir al Tribunal Constitucional. Su supo también que voces fuera de su entorno están tentándolo para que presente una lista alterna –con otras bancadas– para la Mesa Directiva.

Kenji no declaró ayer, pero en su Twitter publicó una caricatura suya disfrazado de William Wallace con el mensaje “Libertad”.

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