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El gobierno de Ollanta Humala se ha venido descomponiendo año tras año. No hay ninguna señal de cambio.
El año pasado enfrentó una crisis extrema al ser censurado su Gabinete. Fue salvado por Pedro Cateriano, quien hizo un extraordinario esfuerzo de concertación con las fuerzas políticas de oposición.
Lamentablemente, los puentes que tendió Cateriano no han sido reforzados y, al contrario, se continuó en la línea de confrontación. El caso de Nadine Heredia ha sido una de las fuentes de conflicto.
La señora Heredia hace gala de su participación en el gobierno. A la hora de ser investigada, sin embargo, dice que no es funcionaria. Tampoco muestra una actitud abierta ni una disposición política de transparencia.
El presidente Ollanta Humala insiste en actuar el papel de esposo ofendido. No tiene otra fórmula. Y no creo que resulte.
La aprobación del gobierno, por eso, seguirá cayendo. Sobre todo porque este no encuentra respuestas ni tiene capacidad de gestión para abordar los problemas centrales del país.
El primer tema es la economía. Hemos ido al vaivén de las cotizaciones internacionales de los metales. No parece que haya cambio de perspectiva.
El gobierno carece de maniobra para destrabar las grandes inversiones. No tiene eficiencia administrativa y le falta manejo político en las regiones.
El presidente pudo jugar un papel determinante al inicio del gobierno. Prefirió, sin embargo, dejarse llevar por la marea.
El segundo tema es la seguridad ciudadana. No hay un planteamiento de reforma. Ollanta Humala no ha querido liderar esa causa. No se ha hecho nada por las comisarías ni por el control penitenciario.
El tercer tema es la corrupción. Las capturas emblemáticas (Orellana, Belaunde Lossio) se han dado a pesar del gobierno. Este, incluso, confronta a la fiscalía y no le da las seguridades y garantías de independencia.
No me parece que algo vaya a cambiar en este último año. Se continuará con una situación de conflicto político, poco crecimiento y menores recursos fiscales. No habrá avances en los temas de seguridad y corrupción.
Seguiremos al vaivén de la marea.
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Las promesas pendientes de los mensajes a la nación de @Ollanta_HumalaT ► http://t.co/DHPWPEJeTk pic.twitter.com/w2UuiXSPtR— Política El Comercio (@Politica_ECpe) julio 28, 2015
