Susana Villarán evita hablar sobre Jorge Barata

Dos semanas después de la declaración de Jorge Barata, ex representante de Odebrecht en el Perú, ante fiscales peruanos, la ex alcaldesa de Lima Susana Villarán volvió a aparecer en público ayer. Ya no en su vivienda de la playa Arica, en Lurín, o camino a una clínica dental, sino ante la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso.

La ex alcaldesa fue citada para responder por la negociación y suscripción del contrato Vías Nuevas de Lima, la ejecución del proyecto Línea Amarilla y los cambios en las tarifas de peaje en ambos casos.

Y aunque contestó la mayoría de las interrogantes de Miguel Elías (Fuerza Popular), presidente del grupo, y los legisladores presentes, optó por guardar silencio cuando fue consultada sobre las recientes declaraciones de Jorge Barata.

Este manifestó que la constructora brasileña aportó US$3 millones a la campaña por el No a la revocación de Villarán en el 2013, y que dicho monto fue solicitado por el ex gerente municipal José Miguel Castro.

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Villarán adujo que por este caso ya es investigada por el equipo especial Lava Jato del Ministerio Público. Sin embargo, durante la sesión, sí se refirió a la concesión del proyecto Vías Nuevas de Lima, otorgada a Odebrecht en su gestión, y negó haber beneficiado a la empresa a cambio de apoyo para la revocatoria.

“No es que uno está esperando que le den platita por lo bajo para firmar un contrato. Esto tiene un proceso”, aseguró.

Indicó además que la buena pro se entregó en setiembre del 2012, cuando “en ese momento no existía [proceso de] revocatoria” y que el contrato se firmó el 9 de enero del 2013, cuando “había sido convocada la revocatoria para ese momento”.

Villarán se refirió al tema luego de que Elías le preguntara si consideraba una coincidencia que la fecha de la consulta de revocatoria (17 de marzo del 2013) haya sido cercana a la firma del mencionado contrato para Vías Nuevas de Lima y a la suscripción de la adenda N° 1 a favor de la compañía brasileña OAS (13 de febrero del 2013) por el proyecto Línea Amarilla, la cual autorizó la ampliación de la concesión de peajes de 30 a 40 años.

La ex alcaldesa, quien estuvo acompañada de su abogado Iván Paredes, aseveró: “No hay ninguna relación de causa efecto, ningún ‘quid pro quo’ [intercambio], como se ha querido ver”.

Durante el interrogatorio, la congresista Alejandra Aramayo (Fuerza Popular) cuestionó la presunta creación de un “marco normativo paralelo para ampliar plazos, generar adendas”. “Nunca he ordenado a nadie que rompa contratos”, respondió Villarán.

—Tesis fiscal—
Cabe recordar que Valdemir Garreta, empresario y publicista brasileño, dijo a la fiscalía peruana en setiembre del 2017 que OAS le pagó US$1 millón por asesorar a la campaña por el No.

En esa línea, la tesis del equipo especial Lava Jato, que le imputa a la ex alcaldesa colusión, lavado de activos y otros delitos, es que Odebrecht y OAS financiaron la campaña por el No con conocimiento de Villarán a cambio de recibir beneficios.

Tras casi tres horas, Villarán y su abogado se retiraron del Congreso. La ex autoridad volvió a guardar silencio al ser consultada sobre lo dicho por Jorge Barata. Elías dijo que entendía su posición.