A tres días de que el Congreso debata y vote la tercera moción de vacancia contra el presidente Pedro Castillo, el Ejecutivo realizó ayer dos cuestionadas designaciones, al ubicar al general EP (r) Wilson Barrantes Mendoza como nuevo jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) y al abogado Raúl Noblecilla como viceministro de Gobernanza Territorial.
Barrantes Mendoza ha participado en foros del Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), brazo político del grupo terrorista Sendero Luminoso. Por ejemplo, en uno de estos encuentros, que se llevó a acabo el 10 de enero de 2018 en el Hotel Riviera, el hoy alto funcionario del gobierno planteó “reconstruir el tejido social roto por la guerra interna” en el Perú, a través de “amnistías generales, indultos y reparaciones”.
También ha señalado que el Movadef, si bien “es una preocupación”, “no es una amenaza” para el país, como sí lo es “el narcotráfico” y el “crimen organizado”.
Recientemente, Barrantes denunció que el ex secretario general de la Presidencia Bruno Pacheco le había solicitado el pagó de S/200 mil para ser nombrado como titular del DINI.
Y, en radio Exitosa, amenazó en vivo al jefe de Gabinete de Asesores de la DINI, Gustavo Bobbio, quien presentó una carpeta con denuncias en su contra por una serie de presuntos delitos.
“Voy a buscarlo y va a ver qué le va a pasar. Esto no se lava con una denuncia, se lava con sangre. Él va a aprender a respetar a la gente y yo lo voy a querellar, y lo voy a ejecutar”, manifestó Barrantes apenas hace cuatro semanas.
En el 2019, el general EP (r), además, llamó, a través de sus redes sociales, a una insurgencia en contra del entonces presidente Martín Vizcarra.
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El exministro del Interior Rubén Vargas refirió que Barrantes no solo tiene cercanía como el Movadef, sino también sería un “operador” de Antauro Humala, cabecilla del ‘andahuaylazo’ que fue excarcelado en agosto último. “Para el presidente Castillo, su nombramiento tiene la finalidad de construir alianzas cínicas que le permitan mantenerse en el poder”, manifestó.
En comunicación con El Comercio, Vargas advirtió que es muy probable que los fondos reservados de la DINI sean utilizados, bajo la administración del general EP (r), para financiar el traslado y el pago “a las portátiles” que necesita el mandatario “para enfrentar” al Parlamento y a las investigaciones que tiene por presuntos actos de corrupción.
Agregó que la contraloría y la Comisión de Inteligencia del Congreso deben fiscalizar el uso de los fondos de esta institución.
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El exministro del Interior Carlos Basombrío alertó que la designación de Barrantes “es gravísima”, porque el gobierno de Castillo pone “al gato de despensero”.
“Hace exactamente lo opuesto a lo que un Estado debe hacer para protegerse de los grupos que quieren destruirlo. Estas nominaciones [las de Barrantes y Noblecilla] y la renuncia del ministro de Defensa pueden forman parte de un paquete de reacomodos en la búsqueda de cerrar el Congreso”, expresó.
Al respecto, el presidente de la Comisión de Inteligencia del Parlamento, José Cueto (Renovación Popular), afirmó a El Comercio que una persona “con este tipo de nexos”, en referencia a la participación de Barrantes en foros del Movadef, no debería estar en la conducción de la DINI. Añadió que citarán al militar en retiro para que exponga su plan de trabajo.
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El factor Bermejo
El otro nombramiento del Ejecutivo que ha sido cuestionado fue el de Noblecilla como viceministro de Gobernanza Territorial de la PCM. El abogado- uno de los asiduos visitantes del presidente Castillo en Palacio de Gobierno- ha sido asesor del congresista Guillermo Bermejo, y también es coautor de múltiples denuncias en contra de la fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
Noblecilla también enfrenta dos procesos disciplinarios en el área de Recursos Humanos del Parlamento por haber tildado de “golpista” a ese poder del Estado en sus redes sociales.
El congresista Alejandro Cavero (Avanza País) indicó que es muy probable que detrás del ingreso de Noblecilla al Viceministerio de Gobernanza Territorial esté Bermejo, “cuyas credenciales democráticas no existen”.
Cavero también calificó de “vacío” el llamado al diálogo hecho por el presidente Castillo tras este nombramiento, al recordar que el abogado se ha dedicado a atacar al Parlamento y a solicitar su cierre.
El ex defensor del Pueblo Walter Gutiérrez indicó que Noblecilla lejos de contribuir a dar solución a los conflictos sociales desde su cargo, lo que hará será “promoverlos” y “azuzarlos”.
“Noblecilla no tiene trayectoria, formación y experiencia [para ese sector], y dudo que llevo a cabo un plan para prevenir los conflictos sociales. Su convocatoria por este gobierno es claramente, desde mi punto de vista, para agudizar [la crisis]. El propósito es generar caos y distraer de la verdadera agenda del país: la lucha contra la corrupción, el crecimiento económico y la seguridad”, subrayó a este Diario.
Gutiérrez remarcó que el interés de Castillo, a estas alturas de su administración, “es sobrevivir” y para ello no le importa “instrumentalizar” el Estado para hacerle frente a sus numerosas investigaciones.
El secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerró, negó, a través de su cuenta de Twitter, que su partido haya tenido injerencia en los nombramientos de Barrantes y Noblecilla. El primero fue candidato al Congreso de su partido en el 2016; y el otro fue su abogado en la investigación por “Los Dinámicos del Centro”.
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Antes de que Castillo asuma el poder, el 26 de julio de 2021, Barrantes se presentó en el Ministerio de Defensa como parte del “Equipo revisor de transferencia de gestión”.
Según el registro de visitas del Mindef, llegó a las 8 a.m. y se reunió con el entonces viceministro de Recursos para la Defensa, José Manuel Boggiano Romano.