El joven de 19 años decidió dejar su provincia natal por una mejor calidad educativa. (Foto: Noticiero Seis)
El joven de 19 años decidió dejar su provincia natal por una mejor calidad educativa. (Foto: Noticiero Seis)
Redacción EC

Si de la adversidad se aprende, las metas son el motor que uno necesita para cumplir con los sueños y eso bien lo sabe . Natural de Trelew, en , quiere ser maestro de Física y mantiene una lucha constante para lograrlo, incluso dejando su hogar para vivir en una camioneta en Bariloche. Esta es su .

Tiene 19 años y ya sabe lo que es trazarse un proyecto de vida. Lo negativo para él, eso sí, son todas las peripecias que ha tenido que atravesar y continúa cruzando para estudiar en la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN). Sus padres, dispuesto a apoyarlo en su aventura, no se negaron a nada y optaron por cambiar su vida a favor del deseo de Facundo.

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Roberto, su padre, fue quien se trasladó a Bariloche con él. Sin una vivienda en aquella ciudad, decidieron transformar la vieja camioneta Chevrolet en una suerte de cada rodante, pero que se aferra al barrio Las Victorias, donde se encuentran desde el 1 de marzo último. ¿Por qué no estudiar en su ciudad? Simplemente porque no iba a poder hacerlo bien.

En Chubut tuvimos paro docente en 2018 y 2019, y a partir de 2020 nos cayó la pandemia. Cuatro años sin clases, casi. O con clases alternadas”, explica Mora para ‘’. “El sistema educativo de la provincia está en decadencia. Hay muchos problemas gremiales y, si bien podía esturar la carrera en Trelew, no me veía con una buena formación allí”, agrega.

Fuente: Noticiero Seis
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El apoyo es de toda su familia

Sobre su papá, cuenta que “se vino conmigo para buscarse un trabajo acá” y que su mamá tuvo que dejar la casa familiar para asegurarse un ingreso. “Ella, que está desempleada desde 2015, se quedó en un quincho que teníamos ahí y que transformó en un departamento donde hoy vive con mi hermana, de 12 años, y mi hermano, de 10″, comenta.

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Todos los días son diferentes, pero algo tienen en común: todos son difíciles”, añade para luego contar sobre la ayuda que recibe por parte de una estación de servicio a pocos metros de su base: le permiten ir al baño, cargar el teléfono y estudiar. “Son muy amables. Me dejan usar el WiFi y la electricidad […] Más tarde voy a la camioneta y sigo repasando los apuntes hasta que se acaba la luz”.

De esta manera, comenzó a seguir sus estudios en Física, donde diariamente camina cerca de 55 cuadras para llegar hasta la sede Tacuarí de la UNRN. Eso sí, confiesa que las lluvias son su peor enemigo: “Se nos mojan los colchones, la ropa, los apuntes y los útiles que uso para estudiar. Se pone complicado. Estamos como podemos”.

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¿Sin embargo, pese a todo lo que atraviesa a diario, su esperanza se mantiene intacta. “Sé que voy a cumplir con el sueño de desempeñarme en la carrera que elegí. Después de la carrera docente, que dura cuatro años, mi idea es hacer la licenciatura en el Instituto Balseiro. Ya llegará”, se motiva.

Fuente: Noticiero Seis
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¿Cómo ayudarlo? Escribiendo a su correo electrónico o llamando al número 2894847652. Solo quiere un trabajo. “Algo que nos permita tener un ingreso. La vivienda puede esperar, llegará después”, sentencia con la misma ilusión con la que emprendió su rumbo.

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