El negro es un color con diversos usos a la hora de vestirse. Por ejemplo, es el color que predomina a la hora de usar un traje elegante. Asimismo, se ha popularizado su uso de manera casual. Así pues, muchas personas coinciden en su uso gracias a su elegancia y versatilidad, ya que es fácil combinarlo con otros colores en otras prendas. Sin embargo, más allá de todos los usos que pueda tener, la psicología ha revelado que su elección constante puede revelar mucho sobre las personalidades de las personas, sus emociones y comportamientos.
¿Qué significa vestir mucho de negro, de acuerdo con la psicología?
Para muchos vestir de negro puede ser una simple elección, pero para los expertos en la ‘psicología del color’, la elección de este tono en la ropa refleja muchos aspectos sobre las personas, que van desde su identidad hasta su carácter. Es tal su afirmación que, para ellos, quienes usan este color con frecuencia tienen unas marcadas características distintivas frente a los demás.
Tal como comparten desde El Tiempo, la psicóloga Lara Ferreiro explicó estas características con el medio ABC. Aquí señaló que, más allá de que este color sea frecuentemente usado porque es fácil de combinar, quienes gustan vestir de negro suelen representar la fuerza y seriedad que hay en ellos a través de su ropa.
Por otro lado, al parecer muchas personas lo elegirían por la percepción que los demás pueden tener. “Esta tonalidad también transmite paz a muchas personas” señala Ferreiro. Así pues, despierta diversas emociones en quien usa el color y en quienes lo ven, pero también revela aspectos interesantes sobre la personalidad.
Un ejemplo que ella señala, es que en muchos casos vestir de negro puede reflejar la intención de las personas de no querer llamar la atención, pues es un color que suele pasar desapercibido frente a otros más llamativos. En ese sentido, podría ser una característica de introvertidos o de quienes tienen complejos físicos. “Este color también puede asociarse con la melancolía y la nostalgia, mientras ofrece una sensación de protección y seguridad”, apunta Ferreiro.
Curiosamente, frente a los ojos de los demás la sensación que se genera puede llegar a ser lo contrario, pues alguien que viste de negro suele ser visto como elegante o misterioso, debido a que proyecta una imagen creativa o rebelde, incluso hasta de intimidación y poder. “En conjunto, quienes eligen el negro suelen transmitir confianza y una fuerte identidad personal”, concluye la psicóloga.