En la antigüedad, cuando los primeros humanos de la Tierra no eran más que cazadores y recolectores, las cuevas eran sus principales guaridas. Estos lugares eran utilizados para refugiarse, ya sea de la inclemencia del clima, el acecho de los depredadores y, por supuesto, para esperar al día siguiente. En el territorio que hoy conforma el Perú no hubo excepción, pues se descubrió que mucho antes de la existencia de las culturas más conocidas, seres humanos ya habitaban la zona y utilizaban distintas cuevas como refugio.
¿Dónde se encuentra la cueva donde habitaron los primeros hombres y mujeres del Perú?
Una de estas cuevas que sirvieron como refugio para los primeros humanos del Perú se encuentra en un cerro del distrito de Pacaicasa, en la provincia de Huamanga en Ayacucho y lleva el nombre de Pikimachay, que en quechua significa ‘cueva de las pulgas’. Fue descubierta en la década de los 70 y tienen un área de 60 metros de largo, 24 de ancho y 12 de alto.
El responsable de su hallazgo fue el arqueólogo estadounidense Richard MacNeish, quien junto a su equipo encontró artefactos tallados en piedra en dicho lugar. En un primer momento, se realizó una prueba de radiocarbono a estos artículos, aproximando una antigüedad de más de 20 mil años. Aunque, posteriormente, en los años 80 se determinó que los artefactos en cuestión eran parte de la cueva y no habían tenido intervención humana.
No obstante, una investigación más reciente reveló que si bien algunas de las piezas eran rocas caídas del techo de la cueva, otro grupo si tuvo intervención de humanos. En ese sentido, se puede asegurar que los artefactos encontrados en Pikimachay son la evidencia más antigua de la presencia de hombres y mujeres en lo que hoy es el Perú. Por si fuera poco, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) aseguró que, en realidad, tendrían una antigüedad de 16,600 a 17,700 años. Debido a ello, desde el año pasado se le considera una Zona Arqueológica.
¿Cuáles fueron las herramientas de los primeros humanos en el Perú?
Fueron 51 rocas y 20 fragmentos óseos los que se encontraron en Pikimachay. Estaban modificados para servir como cuchillos con los que cortar la carne de los animales que cazaban o las frutas y verduras que recolectaban. De acuerdo con el Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú, los artículos presentan talla bifacial, es decir, una forma triangular que se muestra esculpida por ambas caras.
Por si fuera poco, se habrían utilizado ‘cantos rodados’ para su elaboración, que habrían obtenido del río que se encuentra frente a la cueva. Asimismo, las herramientas de roca tienen una alta presencia de sílice, lo que evidencia que los hombres y mujeres de aquel entonces ya tenían la capacidad para buscar y elegir los mejores materiales para la construcción de sus artefactos.