Oración de noviembre a San Miguel Arcángel para protegernos y la prosperidad
Oración de noviembre a San Miguel Arcángel para protegernos y la prosperidad
Redacción EC

Llegó el mes de noviembre y falta poco de finalizar el año. Por este motivo, muchas personas ya se están alistando para la llegada del nuevo año entrante y preparan sus oraciones con el objetivo de tener prosperidad, salud, bienestar y protección en sus vidas.

Y es que, para la mayoría, los ángeles o arcángeles son aquellos confidentes, mensajeros y portadores de buenas noticias, a los que se puede recurrir en tiempos donde hay angustia y desesperación. Ellos son seres de luz que por tradición católica se dice que le transmiten todo a Dios o también a la virgen María.

¿CUÁL ES LA FUNCIÓN DEL ARCÁNGEL SAN MIGUEL?

  • Uno de los más importantes de los Arcángeles, pues se encarga de brindar protección. Él representa el poder, la fuerza y la fe, y trabaja para mantener el orden y el equilibrio. Se lo invoca para pedirle amparo y cuidado; además para quienes están por empezar un viaje o un traslado. Día perfecto para invocarlo: domingo. Color de vela: azul.

Asimismo, este arcángel es conocido por ser quien expulsó a Lucifer del cielo cuando este se reveló, razón por el cual cuenta con un lugar privilegiado en el Reino de Dios. Además, es el indicado para ampararse de toda maldad que acechan en la vida, de acuerdo con Vatican News.

ORACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL

San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla.Sé nuestro amparo contra las perversidady asechanzas del demonio.Reprímale Dios, pedimos suplicantes,y tu príncipe de la milicia celestialarroja al infierno con el divino podera Satanás y a los otros espíritus malignosque andan dispersos por el mundopara la perdición de las almas.

Amén.

Oración para pedir la protección del cielo a San Miguel de Arcángel:

Oh gloriosísimo San Miguel Arcángel, príncipe y caudillo de los ejércitos celestiales, custodio y defensor de las almas, guarda de la Iglesia, vencedor, terror y espanto de los rebeldes espíritus infernales.

Humildemente te rogamos, te digne librar de todo mal a los que a ti recurrimos con confianza; que tu favor nos ampare, tu fortaleza nos defienda y que, mediante tu incomparable protección adelantemos cada vez más en el servicio del Señor.

Que tu virtud nos esfuerce todos los días de nuestra vida, especialmente en el trance de la muerte, para que, defendidos por tu poder del infernal dragón y de todas sus asechanzas, cuando salgamos de este mundo seamos presentados por tí, libres de toda culpa, ante la Divina Majestad.

Amén.