La distinción entre lo derecho y lo izquierdo ha arraigado profundas connotaciones culturales a lo largo de la historia. Si bien la derecha se ha asociado tradicionalmente con la destreza, la competencia y lo correcto, la izquierda ha cargado con un estigma negativo, relacionado con lo maligno, lo perverso y lo amenazador. Estas asociaciones culturales podrían explicar por qué hay más diestros que zurdos en el mundo, pero no es la única teoría que intenta resolver este asunto.
Aunque la explicación intuitiva sugiere que la mayoría de personas son diestras porque hay más habilidad en la derecha, lo cierto es que podría existir una compleja historia evolutiva y cultural en este asunto. A continuación, descubre las fascinantes razones detrás de la predominancia de la diestra en el mundo.
¿POR QUÉ HAY MÁS DIESTROS QUE ZURDOS EN EL MUNDO?
La predominancia de la diestra es un enigma que ha generado un intenso debate científico. ¿Es la diestra una cuestión de genética, de adaptación o simplemente una casualidad histórica? Dos hipótesis que recoge BBC compiten por explicar este fenómeno: una vincula la lateralidad con el sexo, sugiriendo que hay genes que podrían influir en la preferencia por una mano. Otra hipótesis plantea que los diestros podrían haber tenido una ventaja evolutiva en el pasado, lo que habría favorecido la propagación de este rasgo. A continuación, analizaremos las evidencias a favor y en contra de estas teorías.
1. Naturaleza genética ligada al sexo
Los individuos zurdos presentan una tasa de supervivencia ligeramente inferior en comparación con los diestros, especialmente en el caso de los hombres. Esta tendencia ha provocado que se le vincule a niveles de testosterona y a una mayor prevalencia de ciertas condiciones de salud, como enfermedades autoinmunes, migrañas y dificultades de aprendizaje.
Dado que la condición zurda, que se establece alrededor de la pubertad, parece estar vinculada a factores biológicos, surge la pregunta de si existe una base genética para esta cualidad. Considerando que las mujeres también pueden ser zurdas, el cromosoma “Y” queda descartado como posible portador de este gen. Entonces, se plantea la hipótesis de que la zurdería existe un gen recesivo y que se ubica en el cromosoma “X”, lo que provocaría que los hombres manifestarán con mayor probabilidad la condición zurda.
A pesar de esta propuesta, queda por explicar el hecho de que la condición zurda sea más frecuente en mellizos, bebés nacidos antes de término y aquellos que han experimentado dificultades durante el embarazo. De hecho, esta asociación con factores perinatales sugiere que la condición zurda podría estar influenciada por el ambiente, más allá de la genética.
Además, si la condición zurda se heredara como un rasgo ligado al sexo de manera simple, esperaríamos que la mitad de los hombres y una cuarta parte de las mujeres fueran zurdos, lo cual no coincide con las frecuencias observadas en la población.
Entonces, si los zurdos presentan su particular cualidad debido a un componente genético, este debe ser más complejo de lo que se pensaba inicialmente.
2. Presunta ventaja adaptativa de los diestros
Si bien ambas manos poseen la capacidad de alcanzar el mismo nivel de fuerza y destreza, en la práctica observamos diferencias significativas. Esta asimetría morfológica podría indicar la existencia de mecanismos internos que guían el desarrollo de cada lado del cuerpo de manera desigual.
Aunque la simetría es un principio fundamental en la biología, el cuerpo de los mamíferos presenta notables asimetrías que se establecen durante el desarrollo embrionario. Órganos como el corazón, que inicialmente se encuentra en la línea media, se desplaza hacia el lado izquierdo, mientras que los pulmones y el sistema digestivo también muestran asimetrías en su desarrollo.
Dado que el corazón se ubica principalmente en el lado izquierdo, y que una lesión en su zona es más grave, la preferencia por el lado diestro podría haber evolucionado como una adaptación para proteger este órgano vital, especialmente considerando la mayor exposición del tórax al adoptar la postura erguida.
Cabe mencionar que los soldados de distintas culturas han usado escudos en el brazo izquierdo para proteger su corazón y pulmones, dejando la mano derecha libre para pelear. Esta práctica podría sugerir una ventaja evolutiva para los zurdos en combates individuales contra diestros. Sin embargo, la necesidad de coordinar grandes grupos de soldados en formaciones militares ha favorecido la destreza derecha.
Si queremos verificar si la preferencia por la mano derecha está relacionada con el uso de escudos, debemos investigar si esta preferencia existía antes de que se desarrollaran las armas y herramientas. Al estudiar a los cazadores-recolectores actuales, que llevan un estilo de vida similar al de nuestros antepasados paleolíticos, encontramos que también son predominantemente diestros.
Las pinturas rupestres de la Cueva de las Manos en Argentina, que datan de hace más de 10.000 años, muestran una clara preferencia por la mano derecha. Las 829 manos izquierdas impresas en las paredes, en comparación con solo 31 derechas, sugieren que las poblaciones que habitaron esta región eran mayoritariamente diestras.
El arte rupestre de Europa occidental, desde España hasta Italia, también podremos descubrir que la mayoría de las manos impresas en las paredes de sus cuevas son izquierdas .Este patrón, presente en yacimientos como la Cueva de Maltravieso en Cáceres y la Cueva del Castillo en Santander, sugiere que la destreza derecha era una característica común en diversas poblaciones europeas prehistóricas.
Por otro lado, otra forma de conocer la lateralidad de nuestros antepasados es analizar las marcas dejadas por herramientas de piedra en huesos y dientes. Al estudiar estas marcas en la Sima de los Huesos de Atapuerca, se ha concluido que los Homo heidelbergensis, que habitaron esta cueva hace más de 450.000 años, eran principalmente diestros.
A partir de las evidencias presentadas, resulta complejo establecer una causa definitiva para el predominio de la destreza derecha.